Justamente anoche, mi esposo me hizo un comentario acerca de las muchas preguntas que los niños le habían hecho mientras que les "leía" un libro antes de acostarlos. Era un libro acerca de todo tipo de animales, pero no tenía texto, eran puras ilustraciones. "A veces, esos son más difíciles", me confesó mi esposo, "por que me tengo que inventar todo". Pero eso es justamente lo que hace que los libros de ilustraciones sean los mejores para aumentar el vocabulario de tus hijos.
Esto según un reciente estudio de la Universidad de Waterloo en Canadá que observó a un grupo de 25 mamás mientras le leían libros a sus hijos a la hora de acostarlos.
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Los investigadores descubrieron que las mamás usaban vocabulario más complicado y avanzando cuando leían libros de ilustraciones. Como no habían palabras, las mamás se inventaron historias basándose en las ilustraciones y relacionándolas con experiencias de sus propios hijos. Además les pidieron a los niños que hicieran predicciones acerca de lo que iba a pasar.
Esto ayudó a los niños a hacer muchas más preguntas acerca de lo que veían en comparación a cuando se les leía libros que además de tener ilustraciones también tenían palabras.
Según los científicos, muchos padres creen que los libros con texto son mejores que los libros de ilustraciones, pero este estudio demuestra que esto no es totalmente cierto. Así que no descartes los libros de ilustraciones y aquí tienes algunas ideas para cuando se los "leas" a tus hijos:
- Invéntate tu propia historia usando tus propia palabras para describir los sentimientos y acciones de los personajes. Deja que tu hijo participe con sus propias ideas.
- Pregúntale a tu hijo que cree que está pasando en las ilustraciones. Si hay un dibujo de una niña que está feliz, pregúntale por qué cree que está feliz, por ejemplo.
- Juega "veo veo" pidiéndole a tu hijo que encuentre diferentes cosas en las ilustraciones.
Imagen vía San José Library/flickr
