¿Qué clase de madre le da marihuana a su hija de 7 añitos?

Mykayla Comstock__, tiene esa dulzura natural de una niña de 7 años, lo que no tiene es la vitalidad de una pequeña de su edad, porque su cuerpecito se ha visto disminuido a causa de una leucemia, contra la que su madre  Erin Purchase, de 25 años ha emprendido una batalla mortal, al punto que decidió acceder a que la niña consumiera marihuana medicinal.

"Esto me ayuda a comer y a dormir", declaró la pequeña a la agencia AP, a quien también le dijo que "la quimioterapia te hace sentir como si quisieras estar despierto toda la noche". Pero, el padre de la niña, llamado Jesse Comstock, está en total desacuerdo con la decision de su ex y madre de la pequeña Mykayla.

Él se siente preocupado por los efectos que pueda tener el uso de la marihuana –así sea medicinal- en el desarrollo cerebral de su hija, quien asegura que podría estar poniendo en riesgo su futuro  "por decisiones que su madre está tomando por ella".

Jesse Comstock, quien vive en North Dakota, se trasladó el pasado mes de agosto hasta Oregon, donde viven su ex y su hija, para que a la niña le fueran practicados alguno exámenes de sangre en un laboratorio privado. A pesar de que los resultados arrojaron que efectivamente  la niña tiene altos niveles de cannabis en su torrente sanguíneo, legalmente todo está en orden, porque la sustancia fue prescrita por unos doctores con fines medicinales.

Por su parte, la madre alega que como madre hará todo lo que está en sus manos para salvar a la pequeña. Al leer esta noticia me quedé pensativa, como me imagino que tú lo estarás. Qué situación tan difícil por la que están pasando tanto los padres como la propia paciente.

En otro caso, estaría vociferando y soltando pestes por la boca contra esta mujer. Pero no quiero ni siquiera imaginar el dolor y la desesperación que debe sentir una madre a quien le toca luchar de frente contra el cáncer de un hijo chiquito. Quizás en sus zapatos yo haría lo mismo. No lo sé. Aunque también entiendo la genuina preocupación del padre. Así sea medicinal ¿quién puede asegurar que la marihuana no causará algún daño irreversible en la salud de esta niña?  Suministrarle a consciencia droga a un hijo pareciera algo inmoral, una verdadera locura, pero dejarlo morir de cáncer o dejar a la enfermedad avanzar si tenemos una herramienta que nos puede ayudar a vencerlo, también es irresponsable.

Por otro lado, recibir la droga es lo que le está permitiendo comer y dormir; es decir, sobrellevar los efectos de la quimioterapia. ¿Cuál de los padres está hacienda lo correcto? ¿Quién de los dos tiene razón? Este es un verdadero dilema, que ni Ana María Polo y su mazo implacable, podrían ponerle un punto y final y ¡Caso cerrado!

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