El coraje de esta mamá que decidió hacerse pasar por su hija de 12 años, para que la policía pudiera atrapar a un pervertido maestro quien intentó abusar sexualmente de la niña, merece el aplauso de todos.
El desgraciado, porque no se le puede llamar de otra manera, se llama Alfredo Hernández, tiene 29 años, daba clases de canto en el coro de la Berta Cabaza Middle School, en San Benito, Texas y con el pseudónimo "Freddy Love" buscaba niñas en Facebook para abusar de ellas.
Para ayudar a la policía en la captura de este desnaturalizado, y me perdonan todos los adjetivos, la mujer, cuyo nombre no fue revelado para proteger la identidad de su hijita, se hizo pasar por la niña no sólo en Facebook, sino en la vida real, lo que condujo a la captura de este pervertido.
Para ello, esta valiente mamá dejó que su hija abriera una cuenta en Facebook con la condición de que ella la controlaría. Así comenzó a intercambiar información con el tal Freddy Love, quien contactó a su hijita de 12 años haciéndose pasar por un joven estudiante de 20 años de la Universidad de Brownsville, en Texas.
Haciéndole creer al tal Freddy Love que ella era su hija, la mujer dice que le dio a este desgraciado todas las oportunidades de cortar la relación con la niña, pero el hombre insistió e incluso comenzó a hablarle de sexo. La mamá le siguió la corriente y el hombre no sólo le pidió a la niña tener relaciones sexuales, sino que le describió posiciones y demás.
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Cuando lo hombre le dijo a la niña que se escapara de la casa y cómo podía hacerlo sin que su mamá se diera cuenta, la mujer llamó a la policía, les contó el caso y acordaron tenderle una celada al depravado. Fue entonces cuando la mujer, siempre haciéndose pasar por su hija de 12 años, acordó una primera cita con Freddy Love. Él la esperaría dentro de su carro aparcado en el estacionamiento del Walmart local.
Sabiendo que con este último acto de valentía y coraje la policía podría atrapar al degenerado, se puso una peluca, unos zapatos de goma y una chaqueta con capucha. Cuando llegó a estacionamiento de Walmart, el hombre que la estaba esperando en su auto, le dijo que no tuviera miedo y que se montara en el vehículo. En ese momento la policía actuó y atraparon al criminal.
La otra buena noticia es que Alfredo Hernández renunció al cargo que como maestro del coro de la Berta Cabaza Middle School venía ocupando desde hace 6 años: así los impuestos que paga la gente en Texas no se irán en garantizarle un sueldo a este degenerado, sino en pagarle la prisión cuando lo sentencien.
Bravo por esta mamá valiente e inteligente y por la policía de Harlingen. Alfredo Hernández ahora enfrenta cargos por solicitación de un menor en internet, un crimen que puede costarle 20 años de cárcel ¡Bingo!
Imagen vía FOX 2
