Una escuela en la Florida impidió que una jovencita comprara una entrada para el baile escolar anual porque al parecer había sacado un libro de la biblioteca y no lo había devuelto. Es decir, __la joven fue castigada por leer. ¡__Esto sí que se pasa de ridículo! Lo peor del caso es que cuando Dominique Stearns ofreció devolver el libro en el momento que se enteró del problema, le dijeron que eso no cambiaría nada ya que la política de la escuela es que no permitir que los estudiantes participen en actividades como el baile si deben alguna multa.
A Dominique le pareció tan absurdo todo esto que, al principio, pensó que se trataba de una mentira. Y, la verdad, a mi me pasó lo mismo cuando me enteré.
Por su parte, Danielle Olmstead, la mamá de la estudiante, alega que cuando fue con el director de la escuela, él descartó su queja diciendo que Dominique podría ir al baile al próximo año. Olmstead describió el incidente como "patético" y dijo que la escuela debería estar preocupándose por cosas mucho más importantes.
Y es que tiene toda la razón del mundo. Aquí no estamos hablando de una estudiante con problemas de comportamiento que necesita ser disciplinada por faltarle el respeto a un maestro o por pelearse con un compañero. No, estamos hablando de que Dominique sacó un libro de la biblioteca hace unas tres semanas, pero nadie le dijo cuando tenía que devolverlo. La verdad no entiendo porque la escuela no pudo haberle levantado el castigo una vez que ella lo devolviese, tal y como se los ofreció.
Con tanto problema verdaderamente serio que enfrentan las escuelas hoy en día, lo que le pasó a Dominique es totalmente ilógico.
Imagen vía Fox 4 News