Me gustaría decir que la primera vez que quedé embarazada no tenía miedo cada vez que pensaba cómo sería el parto, pero eso no es cierto. Se me hace que cualquier mamá primeriza que dice que no sintió por lo menos un poco de miedo está mintiendo. Y es que, por lo general, uno tiende a sentir miedo de lo desconocido porque lo cierto es que no importa cuánto te hayas preparado para tu primer parto, no hay nada como vivirlo para realmente entenderlo, ¿no?
Desafortunadamente, ahora un estudio ha comprobado que a pesar de ser normal sentir miedo también es malo ya que dificulta el trabajo de parto alargándolo más de lo necesario.
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El estudio, publicado en BJOG, una revista internacional de Obstetricia y Ginecología, encontró que el trabajo de parto de las mujeres que tenían miedo de dar a luz duró una hora y media más que las que no tenían miedo. La recomendación de los expertos es que te relajes y te olvides del temor… claro, porque eso es ¡TAN fácil de hacer!
Aunque yo no sabía que mi miedo podía causar que mi trabajo de parto fuese más largo, sí sabía que quería superarlo antes de dar a luz. Por eso fue que además de educarme lo más posible acerca de todo lo relacionado al parto, también tomé muchas clases de yoga prenatal–creo firmemente en el poder de relajación de la yoga–y, ya casi al final, me inscribí en una clase de hipnosis.
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Muchos me miraron con cara de bicho raro cuando se enteraron de esto último, pero siempre me ha importado muy poco lo que dicen los demás, así que seguí en lo mío. La verdad me ayudó a relajarme muchísimo, especialmente cuando me enteré que después de todo mi hija nacería vía cesárea.
¿Qué es lo que te da más miedo acerca de dar a luz? ¿Qué estás haciendo para superarlo? Comparte tu opinión dejándonos un comentario.
Imagen vía bradleygee/flickr
