¿Tú también sientes que tus hijos están creciendo muy rápido?

Mi hija Vanessa terminó su primer año escolar el jueves pasado y yo he estado bastante emocionada, soltando lágrimas por cualquier cosa porque no puedo entender a dónde se fue el tiempo. Me parece ayer que nos mudamos de Miami a Denver justo antes de que ella naciera, pero ya han pasado casi seis años de eso y mi hija se ha graduado de Kínder y va para primer grado.

Ya sé que esto es algo por lo que pasamos todos los padres, pero Vanessa es mi primogénita, así que yo lo estoy pasando por primera vez. Y es que este primer año escolar se me pasó tan rápido y fue tan importante en su educación ya que aprendió a leer que se me hace difícil no emocionarme.

Lo más chistoso del caso es que un par de días antes de que se acabara la escuela, le dije a Vanessa, "Qué horror! ¡Qué rápido se ha pasado el tiempo! ¿Cómo puede ser que ya estás por acabar Kínder?". A lo cual ella me respondió, "¿Rápido? A mi me pareció lento y larguísimo!". Casi me muero de la risa, pero con eso me demostró que todo depende de cómo miramos las cosas.

Aunque estoy de acuerdo en que todas las etapas de nuestros hijos son interesantes, se me hace que hay algo muy especial de la etapa por la que está pasando mi hija ahora. Vanessa es una niña muy curiosa y está súper entusiasmada por aprender cada día más. Todo lo ve con ojos nuevos y su asombro al descubrir algo nuevo es tan genuino que contagia.

Lo que no me puedo imaginar es que si este año se me pasó rápido, los que vienen van a volar porque este es sólo el comienzo. ¡Parece que derramaré muchas lágrimas en los próximos años!

¿Te pasa lo mismo a ti? Comparte tu opinión dejándonos un comentario. 

Imagen vía familymwr/flickr