Me encantan las actividades que nos dejan matar un pájaro de un sólo tiro y me acabo de enterar que el fútbol es una de esas. Según un nuevo estudio realizado por neurocientíficos suecos, este deporte ayuda a desarrollar la llamada inteligencia del juego, que es la que nos permite tomar buenas decisiones.
La investigación, realizada en el prestigioso Instituto Karolinska, reveló que los futbolistas tienen una gran capacidad de planificación y pensamiento abstracto, y mientras mejor es el jugador, mejores son. Es decir, el argentino Leo Messi es un genio en lo que se refiere a estas funciones, llamadas las funciones ejecutivas.
"Estamos hablando de la habilidad de resolver problemas procesando rápidamente la información y tomando decisiones creativas según el contexto", explica el neurocientífico Predrag Petrovic, uno de los autores del estudio, publicado en la revista científica PLoS One.
El estudio evaluó la capacidad de hacer esto entre futbolistas de las distintas divisiones de Suecia y personas que no juegan fútbol. La investigación reveló que los más inteligentes, desde este punto de vista, son los mejores futbolistas, después los futbolistas menos talentosos, y por último las personas regulares.
Si uno se pone a pensar el resultado tiene lógica. Cuando están en la cancha, los futbolistas tienen que absorber todo lo que está pasando, estar pendiente del resto de los jugadores y tratar de anticipar para dónde va la pelota. Los mejores futbolistas son los que se pueden adelantar a las jugadas del equipo contrario. Esta es una capacidad que uno aplica día a día en la vida.
La teoría de los neurocientíficos es que esta habilidad de pensar rápido y tomar decisiones adecuadas es inicialmente heredada, pero que a lo largo de la vida la gente puede ir desarrollándola y reforzándola.
Me supongo que cualquier deporte ayuda a desarrollar este talento, pero como buena mamá latina, pues me encanta que estemos seguros de que lo hace el fútbol. Pero en cualquiera de los casos, es una razón más para hacer deporte y estimular a nuestros hijos a que lo hagan también. Ejercitarse no sólo es bueno para la salud del cuerpo y la mente, si no que nos hace más inteligentes.
Imagen vía Toni (encontrando la inspiracion 🙂 )/flickr
