La cantante y actriz mexicana Litzy sorprendió a todos con la inesperada confesión que hizo sobre su salud, al revelar detalles de la fibromialgia que padece, una enfermedad que le diagnosticaron en la adolescencia y que no tiene cura.
La celebridad habló sobre este delicado tema en una entrevista que concedió al programa De primera mano, que se transmite a través de Imagen TV, donde habló de lo mucho que ha sufrido a raíz de su condición médica.
En la conversación que tuvo con la emisión, la artista se sinceró sobre algunos de sus síntomas y de sus días más críticos, aquellos en los que no tuvo fuerzas para bañarse, ni para moverse.
Habló sobre el duro golpe que sufrió cuando le diagnosticaron la enfermedad.
La intérprete, quien ya tiene 42 años, confesó en una reciente conversación sobre lo mal que la pasó durante su adolescencia después de que le diagnosticaran fibromialgia, una enfermedad que la ha hecho sufrir demasiado.
“Tengo fibromialgia. Desde que tenía 15 me lo detectaron. Cuando me lo diagnosticaron me dio una crisis muy fuerte que estuve en el hospital paralizada, no me podía mover, me tenían que bañar mis papás”, contó en la sincera entrevista que tuvo con el programa De primera mano.
La pareja del chef Poncho Cadena destacó el gran soporte que recibió por parte de sus papás en sus días más críticos, pues hicieron hasta lo imposible por ella, sin importar que esas acciones también comprometieran su salud.
“Ya estaba grande, mi papá me tenía que sostener y mi mamá me bañaba, fue súper fuerte”, continuó Litzy en su conversación.
No toma medicamentos específicos para atender su enfermedad.
Al tratarse de un padecimiento que no tiene cura, Litzy compartió que no toma medicamento alguno para contrarestar la enfermedad y los síntomas de dolor que le ocasiona.
“Todos los músculos, tendones, articulaciones, coyunturas, todo se contrae. Son como estalactitas, el ácido láctico que tenemos se vuelven como estalactitas, es como si se rompieran y afectaran el músculo, hay mucha inflamación, mucho dolor”, detalló sobre el mal que la aqueja.
Ha recurrido a métodos alternativos para atender su enfermedad.
A pesar de ser consciente de que no existe cura para atender su enfermedad, Litzy detalló que ha buscado una solución en los métodos alternativos, como la acupuntura, masajes y fisioterapia. También ha nadado, corrido, llevado una dieta especial y hasta a terapia psicológica ha recurrido.
“Lo que he descubierto con el tiempo es que es más emocional que físico, la emoción te vuelve el dolor”, compartió.
La enfermedad la pudo llevar al retiro.
La fibromialgia, de acuerdo a Mayo Clinic, es un trastorno caracterizado por dolor musculoesquelético generalizado acompañado por fatiga y problemas de sueño, memoria y estado de ánimo. La condición estuvo muy cerca de llevar a Litzy al retiro y ella misma así lo hizo saber.
“Ha sido una batalla fuerte, un camino fuerte, tienes fatiga crónica todo el tiempo, crisis. Depende en qué situación de la vida estás, que te dan crisis en las manos, en los trapecios, piernas, caderas, en un par de ocasiones estuve hospitalizada.
Me fui dando cuenta de que podía tener control de eso. No puedo dejar atrás mis sueños: cantar o actuar; es crónico, pero no es mortal y no tiene cura”, afirmó. “No me va a detener ningún dolor, encima del dolor he trabajado toda mi vida”.
