Lindsay Casinelli cuenta toda la verdad sobre su dolorosa salida de Univision

La presentadora venezolana Lindsay Casinelli, quien en el 2024 puso punto final a su era como talento de Univision, se sinceró en entrevista con Rodner Figueroa sobre todo lo que no se dijo de su adiós de la cadena, en donde tuvo oportunidad de trabajar en República Deportiva, en Despierta América y en la cobertura de varios eventos deportivos, incluida la Copa América del 2024, evento con el que se despidió de la cadena.

Durante su conversación, Lindsay le dejó claro Rodner que la señal no la despidió, sino que ella tomó la decisión de ya no seguir tras 12 años de arduo trabajo, pues le dio prioridad a la familia que formó con Miguel Ángel García, un alto ejecutivo de Univision.

El adiós de Lindsay coincidió con la mudanza del departamento de deportes a México tras la fusión de Televisa y Univision, lo que la llevó a establecer sus prioridades y eligió a su familia sobre su desarrollo profesional.

Reveló que la empresa la orilló a hacerse a un lado.

La difícil situación financiera por la que atraviesa la televisión, así como la fusión entre Televisa y Univision, fueron los causantes de la salida de Lindsay de su casa televisiva, pues ella jamás contempló la posibilidad de dejar su vida en Miami para mudarse a México, tal y como sucedió con varios de sus compañeros, quienes aceptaron esa opción para no perder su fuente de trabajo.

“Se sabía que deportes se iba ir a México. Siempre se me presentó la oportunidad de yo irme a México y seguir con mi carrera, pero para mí no era una opción con mis hijos y llevármelos a México. A lo mejor yo sola lo hubiera hecho, con los niños no”, se sinceró.

Le hubiera encantado seguir en la cadena.

En otro fragmento de la conversación detalló que ella era muy feliz en Univision, por lo que, de no haber sido por la mudanza, ella seguiría formando parte de la empresa, pues siempre la hicieron sentirse muy querida y especial.

“Si no me hubiesen dicho que tenía que hacer ciertas cosas para poder seguir, yo me hubiera quedado, pero bajo las condiciones fue un despido, un despido lindo, porque no fue un despido malo, no me dijeron un día y yo sin esperarlo: ‘Te vas de aquí’”, detalló sobre la situación que le tocó vivir luego de que dijeran que sí o sí se tenía que mudar a México.

Se fue y dejó las puertas abiertas.

A pesar de que siempre cerrar un ciclo es doloroso, sobre todo cuando es un ciclo al que le dedicaste casi toda tu vida profesional, Lindsay salió de la empresa por la puerta grande y no le dieron la noticia de un día para otro, sino que tuvo oportunidad de mentalizarse y de irse como ella siempre lo hubiera deseado.

“La otra opción era salir de forma amistosa, donde se me pagó por un año de trabajo para que yo estuviera tranquila y no me quedé sin trabajo de un día para otro. Yo me morí de una enfermedad en Univision y es triste que cuando tú vas al trabajo, sabiendo que es tu último evento. Terminé llorando seis meses, vine llorando, triste porque amo lo que hago, me encanta comunicar”, continuó la talentosa presentadora.

Si bien es cierto no fue la única talento que quedó fuera con la mudanza, Lindsay se siente muy afortunada porque a ninguno de sus excompañeros de deportes le organizaron una despedida como la que ella tuvo en Despierta América, en donde la hicieron sentirse muy especial por todos los años en que formó parte de la emisión y de Univision. “A nadie de deportes le hicieron una despedida tan bonita como a mí”, compartió.

No pierde la esperanza de algún día volver.

Aunque en la actualidad está enfocada de lleno en su rol de mamá y esposa, la joven de 33 años no descarta algún día volver a la que fuera su casa televisiva o a alguna otra cadena.

“Yo pensaba que cuando saliera de Univision, se acabó mi carrera y resulta que no. Quiero regresar a comunicar, me encanta comunicar”, dijo convencida a casi un año de su partida y mientras disfruta como nunca a sus dos hijos; durante sus tiempos en la tele, le tocaba trabajar los fines de semana y por las noches, por lo que ahora pasa un tiempo más de calidad con Mikele y Mássimo, sus dos hijitos.