Lo que prometía ser uno de los días más felices para Lele Pons y Guaynaa, terminó con un giro inesperado. Su emotiva fiesta de gender reveal, organizada para compartir el sexo de su primer bebé, se volvió viral por una razón que nadie esperaba: Lele sufrió dos caídas durante el evento, lo que encendió las alarmas entre sus fans … y en ella misma.
Las imágenes del momento no tardaron en circular por redes sociales, mostrando cómo la creadora de contenido resbaló frente a sus invitados. Aunque intentó mantener la calma y proteger su pancita usando manos y pies, el susto fue inevitable. A pesar de que el ambiente siguió siendo festivo, la preocupación no tardó en invadir a sus seguidores, quienes comenzaron a preguntarse si todo estaba bien con Lele y su bebé.
Las reacciones no se hicieron esperar.
Lele Pons con tacones, de entrada. Por poco y cae encima de su barriga. Eso pudo haber terminado en tragedia. Ni en ella ni en el padre de su bebé cupo la prudencia.
— Emmanuel ZP (@EmmanuellePaez) April 26, 2025
De verdad hay gente que no debería reproducirse. pic.twitter.com/tUl2hLrVrV
Mientras muchos fans le enviaron mensajes de apoyo, otros criticaron duramente la situación, algo que afectó emocionalmente a la influencer. De hecho, la ola de comentarios negativos fue tan intensa que Lele decidió alejarse temporalmente de las redes para cuidar su salud mental.
Confirmado: Lele fue al hospital tras el incidente.
En una entrevista con el periodista Javier Ceriani, Lele confirmó que al día siguiente de la fiesta, acudió al hospital. Aunque no presentó lesiones físicas graves, los médicos consideraron necesario hacer una evaluación completa debido al estrés que vivió tras la caída. También le recomendaron reposo emocional.
“Físicamente estoy bien, pero emocionalmente no he estado bien”, confesó Lele, visiblemente afectada. Explicó que, tras el evento, sintió una urgente necesidad de calmarse, consciente de que su estado emocional puede influir directamente en la salud de su bebé. Con apoyo profesional, ha estado trabajando en controlar la ansiedad que le provocó el incidente y la reacción del público.
Jamás pondría a su bebé en riesgo.
Uno de los golpes más duros, según contó, fueron las críticas que insinuaban que había puesto en riesgo a su hijo. “Siempre he querido ser mamá. Jamás haría algo que pudiera dañar a mi bebé”, aseguró entre lágrimas, dejando claro que fue un accidente que, afortunadamente, no pasó a mayores, así que todo quedó en un susto.
