Hallan muertas y tomadas de la mano a dos niñas desaparecidas en las inundaciones en Texas

El pasado 4 de julio Texas vivió uno de los días más tristes tras las fuertes inundaciones registradas en diversos puntos del estado, las cuales han causado hasta el momento, la muerte de 104 personas, mientras que decenas siguen desaparecidas.

Entre las víctimas mortales de esta tragedia hay 27 niñas y varias instructoras que formaban parte de un campamento cristiano, así como dos menores más, a quienes hallaron muertas tras reportarlas como desaparecidas.

La historia de estas pequeñas, Blair y Brooke Harber, llama la atención porque cuando las encontraron estaban tomadas de la mano y llevaban consigo sus respectivos rosarios, con lo que dieron muestra del gran lazo que las unía.

Las menores desaparecieron junto a sus abuelos.

Blair y Brooke, de 13 y 11 años, desaparecieron el 4 de julio tras las fuertes inundaciones registradas en la localidad de Hunt, siendo hasta horas más tarde que encontraron sus cuerpos sin vida a 15 millas de distancia del lugar donde las vieron por última vez.

Las dos menores se encontraban en compañía de sus padres y de sus abuelos cuando el agua las arrastró, al igual que a sus abuelos, mientras que sus padres lograron mantenerse en tierra firme.

Sus papás hicieron lo imposible por rescatarlas.

En el momento de esta tragedia la familia, originaria de Dallas, estaba disfrutando de unos días de descanso en las cabañas de unos vecinos, sin imaginar que su escapada se convertiría en su peor pesadilla.

Las menores y sus papás estaban durmiendo en cabañas separadas, siendo la cabaña en la que estaban ellas la que resultó más afectada. Tras darse cuenta de lo sucedido, RJ Harber y Annie, los papás de las menores, salieron a su rescate aunque ya la corriente les impidió llegar caminando hasta el lugar donde ellas dormían.

Pidieron un kayak prestado para ir en búsqueda de sus hijas.

Los intentos de los padres por salvar a sus hijas alcanzaron niveles inimaginables. Llegaron a pedir prestado un kayak a un vecino y salieron en búsqueda de las menores. Sin embargo, la corriente de agua frustró sus deseos de llegar hasta el lugar donde descansaban sus hijas y terminaron siendo rescatados junto a otros cinco vecinos que lograron sobrevivir ante esta devastadora tragedia natural.

De acuerdo a Jennifer Harber, la hermana de RJ, padres e hijas alcanzaron a intercambiar mensajes antes de que de dejaran saber de ellas, incluso en uno de los mensajes Brooke les dijo que los amaba.

Los equipos de emergencia recuperaron los cuerpos de las menores.

A pesar de que los Harber tenían la esperanza de encontrar con vida a las pequeñas, esta se esfumó cuando los equipos de emergencia les informaron sobre el hallazgo de sus cuerpos, siendo de llamar la atención que en ningún momento se soltaron de la manos y que llevaban con ellas sus inseparables rosarios.

“Sus manos estaban entrelazadas”, declaró Jennifer en entrevista con KHOU sobre las dos menores que eran estudiantes de la Escuela Católica St. Rita en Dallas, Texas.

Los abuelos de las menores siguen desaparecidos.

Aunque los equipos de emergencia ya hallaron los cuerpos de Brooke y de Blair, estos siguen trabajando en la búsqueda de Mike y Charlene Harber, sus abuelos todavía desaparecidos, sumándose así a las decenas de personas de las que aún se desconoce el paradero a cuatro días de la devastadora tragedia.

En una entrevista con CNN, RJ Harber dedicó unas emotivas palabras a sus hijas, quienes eran muy creyentes y nunca se despegaban de sus rosarios.

“Blair era una estudiante talentosa y tenía un corazón generoso. Brooke era como una luz en cualquier habitación; la gente se sentía atraída por ella y los hacía reír y disfrutar del momento”, declaró RJ sobre la dolorosa pérdida que sufrieron y que los llevó a crear una campaña en GoFundMe para buscar recaudar fondos.