Quizás te estés preparando para un día de diversión familiar o un día rutinario y en el momento menos pensado… ¡sorpresa, incertidumbre y ansiedad! Acabas de sufrir un accidente automovilístico. La policía, de ser necesario, escribió su reporte. Las compañías aseguradoras han sido notificadas y, suponiendo que nadie resultó lesionado, has presentado un reclamo de seguro de automóvil. ¿Y luego qué?
Durante los días que toma el procesamiento del reclamo (que te pueden parecer más de los que son en realidad), lee nuevamente los documentos de tu póliza de seguros para que verifiques la información específica sobre tu cobertura. Por ejemplo, puede ser que tu plan de seguro cubra el alquiler de un auto por un determinado número de días.
Además, es probable que tengas que contar y recontar la secuencia de los acontecimientos relacionados con el incidente varias veces durante este proceso. Con el fin de proporcionar la información más precisa posible, es mejor que anotes todos los detalles del incidente tan pronto como sea posible. Así no dejarás nada que se te pueda olvidar con el paso de los días y podrás contar los detalles correctamente cada vez.
Después de haber presentado tu reclamación al seguro, un ajustador de reclamaciones revisará el caso. El ajustador se pondrá en contacto contigo para confirmar algunos detalles del incidente. Si tienes cualquier duda, consúltasela.
Pero entiende que, en cierto momento, si se evalúa que el daño es más costoso que el valor del auto, la compañía de seguros puede elegir la opción de pagar una suma total por tu automóvil. Si se decide que es mejor reparar el auto, pregunta a tu compañía aseguradora si tienen una red de talleres de reparación. State Farm®, por ejemplo, ofrece el programa Select Service®.
Así que no te olvides: ¡la seguridad ante todo! Si pasa lo peor y tienes un accidente, llama a la policía y a tu compañía de seguros, documenta y recopila la información necesaria y, como siempre, cuídate y cuida a los tuyos.
Yoly Mason, bloguera radicada en Orlando, FL, quiere vivir en un mundo donde las mujeres latinas puedan disfrutar de la vida a pleno con un presupuesto pequeño, ya que estar endeudado está tan de moda como el teléfono de disco.
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