Más allá de calabazas, telarañas, calaveras, y brujas, es todo un enigma cuando de casas embrujadas se trata. El experto Noé Campos Yohualtochtli es un chamán con experiencia en trabajos espirituales y eventos extranormales tales como posesiones de personas, lugares o cosas, así como maldiciones impuestas sobre personas o lugares, así que presta mucha atención a estas señales que te dejarán saber si tu casa está embrujada. ¡Toma nota y manos a la obra!
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Una vez experimenté un cambio drástico de ánimo cuando llegué a la casa, pero era algo sin sentido porque no había razón para sentirme deprimida. Justo antes de entrar, me setían completamente bien y contenta, pero al entrar a mi hogar, el cambio en mí era casi palpable. Fue algo muy pero muy raro, ¿verdad?
Bueno, creas o no en estas cosas, nunca está de más echarle un vistazo y evaluarlo, porque, la verdad, ¿quién sabe? No pierdes nada con informarte sobre estas cosas, por si algún día te ves en una situación como las que compartiré a continuación. No pierdes nada con repasar estas señales y ver si algunas están ocurriendo en tu caso.
Puedes tener experiencias sensoriales extraordinarias o fuera de lo común.
Puedes detectar olores como a rosas o flores frescas; o por el contrario un olor a putrefacción. También se observa pasar cerca de nosotros algunas sombras blancas o negras, vistas apenas de reojo. La temperatura baja o sube de manera incomprensible.
Las entidades pueden plasmarse en espacios físicos de la casa creando una impresión gráfica de rostros o imágenes.
Notarás el oscurecimiento de paredes, techos o pisos; manchas plasmadas en los muros; aparición de rostros con características demoniacas en objetos, espejos, o fotografías familiares.
Según su experiencia en este tipo de contactos, la casa también da señales de deterioro inexplicable.
Puedes percatarte de que tus objetos empiezan a moverse de forma extraña.
Los objetos cambian de lugar, desaparecen, flotan, salen volando con fuerza. Se prenden o apagan aparatos electrodomésticos o se funden, los teléfonos suenan y no hay interlocutor o se escuchan voces lejanas y sonidos guturales.
Los habitantes tienen cambios abruptos en sus estados de ánimo y discuten por todo.
Se presentan discusiones entre los habitantes de la casa. Al llegar a ella se siente cansancio o pesadez; se sienten miradas extrañas, se padecen dolores de cabeza severos, tropiezos, fiebre corporal, mal dormir, perdida del sueño.
Los habitantes comienzan a tener experiencias extra normales solo dentro de ese espacio.
Visiones, ruidos, sensaciones extrañas, dolores. Los síntomas que presentan los habitantes de la casa solo se dan al momento de habitarla, son exclusivos del lugar, pues al salir de ella o ausentarse una temporada los síntomas desaparecen.
Se da lo que el especialista menciona como posesión u opresión a través de objetos o seres vivos.
Juguetes o muñecos de peluche que cobran vida, mascotas que lloran o se estresan de manera irregular, presencia de episodios de “ausencia mental” en algunos habitantes de la casa.
Es posible la aparición de depresión o nostalgia severa en los habitantes sin ninguna causa que la justifique.
No solo es el estado de ánimo tendiente a la tristeza y falta de sentido, también, puedes sentir opresión en el cuerpo o lo que muchos popularmente llaman subida del muerto.
El espacio en el que vives es sensible debido a los sucesos que pudieron haber ocurrido en el pasado.
La energía de situaciones o eventos desgarradores como violaciones, suicidios o asesinatos ocurridos ahí, así como casas construidas sobre terrenos de panteón plasman la energía negativa que la acompaña siempre.
