Huye de los hombres egocéntricos, soberbios, inseguros e inmaduros. Tienen el típico perfil que puede llegar a lastimar tu autoestima. Solo buscan control y dominio para cubrir sus propias inseguridades. El problema grave es que si tú estás en medio, te arrastrarán con ellos. ¡Mucho cuidado!
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El hombre que disfraza su control con maneras amorosas donde lo único que quiere es dominarte.
Te lo digo porque te quiero lo hago por tu bien, son frases controladoras disfrazadas de amor y que vienen para suavizar una crítica hacia ti. Eso puede confundirte aunque al final casi siempre te están diciendo que tienes que hacer las cosas a su manera.
El hombre que se acerca a ti y casi inmediatamente se aleja dándote dobles mensajes.
Te amo pero tengo miedo, te amo pero no estoy seguro de querer estar contigo, te amo pero no me siento listo. Es posible que te entusiasmes y te desilusiones en fracción de segundos, cayendo en el grave error de pensar ó ¿Será que algo malo hay en mí? o ¿Estará comprometido?
El hombre que envidia tus triunfos y tu crecimiento y que se molesta cuando alguien más te reconoce.
Eres muy inteligente pero fue cuestión de suerte, creo que no lo hubieras logrado sin mí, gracias a mí ha llegado tan lejos. Este tipo de afirmaciones sacan a la luz la rivalidad que tiene contigo por sobresalir. Su autoestima es baja y busca la manera de que tú te sientas igual.
El hombre inseguro que piensa que todo el tiempo lo estas engañando con alguien más y que te persigue con sus preguntas.
Sentir el acoso de su desconfianza puede cambiar tu esencia y apagar tu brillo con tal de que él no se sienta amenazado. Con el paso del tiempo su inseguridad se vuelve tu responsabilidad cuando las cosas no deberían ser así. Esto solo lastima tu autoestima y modifica tu personalidad.
El hombre que te hace culpable por todo lo que le pasa y es incapaz de aceptar sus errores.
Si no fuera porque tú hiciste esto, si no fuera porque me dijiste lo otro. En fin, para él es difícil aceptar que un problema de pareja es de dos y que la responsabilidad es compartida. Esto a la larga puede llevarte a sentir que realmente eres la culpable de todo lo malo que pasa entre ustedes.
El hombre para el que nunca es suficiente hagas lo que hagas, siempre pidiéndote más y más.
Por más que intentes hacer todo lo que esté en tus manos para complacerlo, siempre recibirás un reproche o reclamo de su parte. El punto es que jamás verá tus esfuerzos, solo notará aquello que “según él”, te falta por darle.
El hombre chantajista que todo el tiempo se victimiza para decirte lo mucho que sufre por ti.
Con tal de que no te separes de él, este tipo de hombre juega todo el tiempo al “Pobre de mí”. Y es que es tal el dolor que dice sentir con tus actitudes que puedes terminar creyéndotela y sentir que eres muy cruel.
El típico machista que no quiere levantar ni un solo plato por creer que esas son cosas de mujeres.
Aunque no lo creas, en estos tiempos todavía hay hombres que piensan que las mujeres solo deben estar en la cocina y no pueden expandir su mundo. Si este es tu caso, sal de inmediato de esa relación machista en la que solamente te sentirás reprimida y amargada.
El que busca que lo rescates de todos los problemas en los que se mete y se enoja mucho si no lo haces
Él te trata como mamá y no como pareja, quiere que soluciones su vida y sus rachas de mala suerte. Busca que le digas que hacer, cómo hacerlo y además te lo exige como si esto fuera tu obligación poniendo en riesgo tu seguridad, tu trabajo o hasta tu integridad.
El hombre que cree que es el centro del universo y que todo debe girar en torno a él.
Yo también soy, Yo también tengo, Yo también, yo, yo… Este tipo de hombre no te permite crecer y te opaca cada que tiene oportunidad. Es prepotente, descalifica todo lo que dices y además quiere ser el primero antes que todo.
El que te hace sentir invisible, no te dice nada malo pero tampoco nada bueno y parece un fantasma.
La ausencia emocional puede ser una patada fatal a tu autoestima. Es posible que estén juntos mucho tiempo pero aun así tú lo sientas desinteresado, apático, lejos de ti aun estando cerca.