Dicen que lo que te choca te checa y es que cuando haces cortocircuito con alguien por lo insoportable que te parece, ¡agárrate! que quizá sea tu espejo. En pocas palabras y según los expertos, aquello que te molesta de los demás puede ser algo que te moleste de ti misma. Así que como dicen por ahí: Lo que no me gusta de ti lo corrijo en mí.
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Estás rechazando algo de ti misma al sentirte tan enojada hacia esa persona que tanto te desagrada.
No es lo mismo una opinión objetiva, a que juzgues con frases como: No la soporto cerca de mí. Aquí, estás enganchándote en una emoción incómoda y sintiendo un rechazo profundo ya que te recuerda partes de ti que no has logrado aceptar. La clave está en que te aceptes y aceptes a los demás.
Revelas un posible sentimiento de inferioridad disfrazado de arrogancia cuando crees que tú estás bien y los demás están mal.
Si te has visto pensando y sintiendo que tienes la verdad absoluta y que tu opinión es la única que cuenta, estás siendo arrogante y muestras poca flexibilidad, lo cual a la larga te afectará solo a ti. Aprende de los demás y date la oportunidad de probar otros caminos.
Se asoman tus frustraciones cuando no quieres reconocer el éxito de otros y lo sientes como producto de la suerte.
No es tan buena como parece, tiene la mesa puesta o creo que están exagerando, son frases características que revelan tus frustraciones por no alcanzar tus propios logros. Observa tus metas no cumplidas e intenta llegar a ellas y dejarás de sentirte molesta con el progreso de otros.
Puedes sentir envidia y también considerar que la vida ha sido injusta contigo por no tener lo que otros sí tienen.
Dicen que la envidia es un sentimiento que corroe el alma y todos la hemos sentido alguna vez, lo importante es que te des cuenta a tiempo antes de convertirlo en amargura. Así podrás esforzarte y tener la vida que quieres sin compararte con otros.
Te sientes incapaz de lograr las cosas que te propones considerándote poco suficiente o poca cosa.
Yo no necesito tanto, creo que sería demasiado para mí, yo soy feliz así, no como ella que… Son frases y pensamientos claros que te dictan tu sensación de incapacidad para poder superar tus límites. Tú puedes, no te conformes y concéntrate en ti para lograrlo. Olvídate de los demás.
Se descubren tus deseos ocultos porque tocas ese lado de ti que nunca dejas salir.
Criticar o juzgar demasiado los hábitos, costumbres o gustos de alguien como: Es bien floja, nunca hace nada, puede ser parte de un deseo reprimido traducido como un Yo quisiera tener tanto tiempo libre como ella.
Aparecen tus propios defectos con el molesto recordatorio de que no eres perfecta.
Cuando te ves a través de otros, sintiendo un nudo en el estómago porque te topaste con un defecto que te parece insoportable, debes revisarte y darte cuenta en qué forma tú también manifiestas ese defecto en tu vida. Relájate y acepta que no eres perfecta.
Muestras todos los complejos que no te permiten vivir ni libre ni feliz y arruinan tu seguridad.
Estás tan pendiente de los complejos que ves en los demás- Es muy insegura, camina muy lento, no me mira a los ojos – que no te das cuenta de que realmente eso a lo que le pones tanta atención son complejos que podrían ser parte de ti.
