Comprar tu primer auto como madre de familia es toda una experiencia. Para comenzar, tienes que decidir si vas a hacer un lease, si lo vas adquirir al contado o si lo vas a financiar. Luego, está ese delicado equilibro entre lo que necesitarán los niños y toda la familia, y lo que más te gusta a ti y a tu pareja. Son muchas las cosas que debes tener en cuenta al momento de empezar a buscar tu primer vehículo familiar. Pero no te desesperes, que aquí te tengo cómo tomar la mejor decisión.
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Ahora que ha crecido la familia, necesitarás suficiente espacio para los niños y para llevar todo tipo de cosas que puedan necesitar. También querrás que el vehículo sea bien cómodo para que todos se sientan agusto cuando les toque irse de viaje por carretera. Y claro, debe ser bastante seguro, pues eso es lo más importante.
Son muchas las cosas que hay que tomar en cuenta a la hora de comprar un auto para la familia, y sé que puede ser abrumador. Pero, lo más importante es siempre tener presete las necesidades específicas de tus seres más queridos. Aquí te comparto una lista de 10 cosas que siempre debes considerar cuando estés buscando ese primer auto.
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Compra el modelo más moderno que puedas.
Expertos en seguridad familiar aseguran que es mejor priorizar año de fabricación a espacio, a la hora de comprar un auto. Los más modernos traen muchas más herramientas para ayudar al conductor y están diseñados para proteger a los pasajeros a la hora de un accidente.
Hazte la vida más fácil.
El estrés es parte de la realidad de la vida familiar. Si puedes adquirir un auto que tenga donde colocar las cosas de los niños, incluyendo los vasitos y hasta las merienditas, puedas abrirlo cuando tienes las manos llenas y no deja que los chiquitos abran las ventanas sin tu permiso, pues mejor que mejor.
Averigua los ratings de seguridad.
Quizá el auto de tus sueños es el más lindo, pero no el más seguro, o quizá sí lo es. La única forma de saberlo es educándote al respecto. Un buen sitio para comenzar es la National Highway Traffic Safety Administration.
Verifica el gasto de la gasolina.
¿De qué te sirve tener un auto ultra cómodo si te estropeó el presupuesto y no puedes ir a ninguna parte? Revisa el promedio de gasolina que gastaría ese que estás mirando. No le creas solo al vendedor, si puedes haz una prueba y si no investiga con amistades y en Internet.
Chequea qué tan fácil es operarlo.
Una semana después de que me compré mi camioneta adorada me arrepentí. Dos años después aún no he conquistado el difícil mecanismo para usar el GPS, y ni me hables de otras cosas. Asegúrate de que puedes usar todas las cosas por las que estás pagando.
Pregunta por el seguro.
El precio del seguro de tu auto es determinado por muchas cosas, incluído el color. Averigua bien cuánto te van a cambiar las mensualidades antes de dar la cuota inicial.
Anticipa las necesidades de tu familia.
Quizá aún estás embarazada y te parece bien comprar un auto pequeño y cute, pero eso no va a funcionar una vez que nazca tu bebé. Los recién nacidos ocupan más espacio que un niño mayor, porque hay que cargar con un montón de cosas para atenderlos. Así pasa a cada etapa. Pregúntale a otras mamás si les gusta su auto y qué quisieran que tuviera para que fuera perfecto.
Acuérdate de lo que hacen los niños.
Ya me pasó. Me quise ahorrar bastantes dólaritos y escogí asientos de tela para una camioneta que tuve como lease. Lo que no pagué mensualmente, lo tuve que entregar para cubrir las manchas que mis querubines dejaron en los asientos. Si tienes niños lo mejor es cuero, que se limpia con facilidad. Si tienes perros hay que pensarlo mejor, pues el cuero es más sensible a las uñas y rasgaduras. Piénsatelo bien y toma la decisión concientemente.
Revisa que tenga buen espacio de carga.
Muchos padres se sienten atraídos por los modelos crossover sin darse cuenta de que al subir la tercera fila se acabó el espacio de carga de atrás. Otros se enamoran de modelos pequeños sin darse cuenta de que no cabe el cochecito del bebé. Fíjate bien en el espacio del maletero. A veces parece gigante, pero no lo es.
Asegúrate de que te sientes cómoda.
Un auto es la segunda inversión más importante de una familia después de la casa y ese primero como mamá va a ser parte de tus recuerdos. Asegúrate de que te sientes cómoda financiera y prácticamente con él. Acuérdate que lo vas a tener por un buen rato y en él irá la carga más preciada: Tus hijos.