Los propósitos motivan y te dan la esperanza de una mejor calidad de vida. Sin embargo, requieren de fuerza, voluntad y permanencia. Pero, ¿quién no los ha abandonado a mitad del camino? Aquí te paso ocho formas sencillas para que puedas cumplir cada uno de tus objetivos del 2016, sin darte por vencida.
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Imagen vía Corbis
Una sola meta
Por cuestiones de voluntad, te sugiero que concentres toda tu energía en una sola meta. Ten por seguro que un propósito cumplido vale más que doce pedidos.
Propósitos que “quiero” no que “debo”
Las metas son personales. Enfócate en lo que necesitas, para que tu esfuerzo sea verdadero. Los propósitos basados en lo que "debe ser" o en la presión que otros ejercen, forman parte de un modelo que muchas veces no encaja con lo que tú quieres realmente.
Deja de engañarte
No hagas una lista de propósitos inalcanzables. Toma en cuenta la realidad de tus habilidades y capacidades, y del momento. Claro que eres capaz de muchas cosas, siempre y cuando no quieras ver las estrellas en un día soleado.
Suelta lo que necesites soltar
Cierra los ciclos inconclusos, hazte cargo de los asuntos pendientes que te impiden comenzar de nuevo y deja atrás lo que no te funciona. Notarás cómo esa nueva vibra comienza a abrirte caminos.
Imagina el resultado final
Cierra tus ojos, y siente en tu cuerpo y en tus emociones la dicha del resultado final. Imagínate fluyendo en el propósito cumplido, y encuentra el entusiasmo en tu interior. Siéntelo como algo que ya has logrado.
Hazte recordatorios intermedios
Pide apoyo a tus amigos y familia, para que te reiteren la meta cuando sientas que te sales del camino trazado. Coloca mensajes escritos de motivación en el espejo en el que te miras por las mañanas, y practica la frase: "Solo por hoy".
Olvida la ley del menor esfuerzo
No pretendas que los cambios lleguen de afuera. Toma el timón de tu barco y mueve tu energía. Para que eso pase, tienes que hacer que las cosas sucedan, y eso solo lo lograrás esforzándote.
Haz un mapa de la prosperidad
Pega en una cartulina imágenes o fotos de aquello que represente tus metas cumplidas (una familia feliz, un trabajo excelente, el pago de una deuda, etc.). Obsérvala con atención todos los días, y llénate de la sensación de paz que eso te brinda. Verás los resultados en muy poco tiempo.