11 Maneras en que tu esposo te puede estar enfermando

No es una exageración. No podemos vivir sin ellos, pero qué tortura que dejen los zapatos regados, o los calzoncillos sucios tirados en el cuarto de baño, o que metan los platos en el lavaplatos sin quitarles primero los restos de comida, y no se les ocurra nada mejor que ver la lucha libre en la tele cuando hay tanto programa bueno que ver. Los hombres son unos personajes. Los adoramos pero en el fondo de nuestros corazones sabemos que "somos" (nosotras) de naturaleza superior. Sigue leyendo para que veas por qué digo que los hombres pueden enfermarnos y hasta volvernos locas.

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Mira la galería de fotos y después me dices si no es verdad que un marido es un ticket seguro a la locura.

Imagen vía Thinkstock

No puedes con el desorden

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Está comprobado que estar casado hace que las personas vivan más tiempo, pero si tu pareja deja la ropa sucia tirada por todos lados, o cada vez que saca una T-shirt del armario deja tirada una “torre” de camisetas completas, ¿no podrías morir de locura antes de tiempo?

No puedes con el toilet

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No es sólo que deja la huella (las odiosas gotitas amarillas) cada vez que usa el toilette, es que ¿por qué no puede bajar la tapa? Te juro que entiendo a una mujer que conocí en California que obligaba al pobre hombre a que orinara sentado. Signo inequívoco de locura.

No puedes con su panza

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Todos estos hombres que te voy a nombrar tienen más de 35 años: Luis Fonsi (37), Enrique Iglesias (40), Juanes (42), Marc Anthony (46). Todos tienen el abdomen plano. ¡Ah! Pero el que duerme contigo tiene una panza más grande que si estuviera 6 meses de embarazo. ¿Por qué? ¿Por qué a nosotras?

No te deja ser

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Tengo una amiga periodista que como yo, es escritora freelance. Se muere por tener su propio blog y qué te cuento que no termina de montarlo porque como no es un “trabajo remunerado”, su marido le pone mala cara y le dice que para qué va estar perdiendo el tiempo en eso. ¿No es para matarlo?

Te hace engordar

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A ver, cuéntame ¿cuántas libras has engordado desde que te casaste? Claro que sí. No somos nosotras que vivimos aquí pegadas en MamásLatinas viendo cómo hacer flanes que no engorden. Son ellos que nos hacen quedar embarazadas y con ello perder nuestro añorado vientre plano. Son ellos que nos hacen cocinar tacos, tamales y enchiladas. Son ellos a quienes no les gustan los licuados verdes. Pero si es que yo estoy convencida de que para mantenernos en la talla ¡no podemos estar casadas!

Te hace beber

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Enriqueta Lemoine

Otro efecto secundario del matrimonio es el alcohol. Y mira que no lo digo yo sino un estudio de la Sociedad Americana de Sociología: las mujeres tendemos a beber más cuando estamos casadas para no dejar a los hombres solos y yo que también para liberar el estrés que significa ¡vivir con un oso!

Te irrita la piel

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Una cosa es que con el paso del tiempo, todas terminamos acostumbrándonos a todo, pero de que tener marido te irrita la piel, te la irrita. A menos que estén recién afeitados, la piel del rostro de los hombres es lo mismo que un papel de lija … ¿si o no?

No te deja dormir

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Cuando no es que te están buscando, están roncando. ¿Quién puede dormir así?

Te da alergía

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¿Habías oído de alergia al semen? No son cosas mías. Aquí en Estados Unidos hay por lo menos 40 mil mujeres que son alérgicas a la esperma masculina. ¿No me vas a negar que es para volverse loca?

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No te atiende

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No te imaginas la cantidad de matrimonios que se van a la cama juntos pero como si vivieran en mundos distintos. No tienes idea de la cantidad de maridos que jamás tocan a sus esposas. No lo justifico, pero con razón hay tanto cornudo.

Te rompe el corazón

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Y sí, aunque sean desordenados, descuidados, panzones, a veces no nos dejen ser, no nos dejen dormir, nos hagan engordar, nos raspen la cara y todas esas cosas que nos pueden llevar a la “locura”, los queremos como a nadie. Y lo peor que nos puede pasar es que nos rompan el corazón, así que dejemos la quejadera y ¡vayamos a consentir a nuestros hombres y a disfrutar de la vida en pareja que nadie dijo que el matrimonio es un cuento de hadas!