Cuando se es periodista se aprende demasiado rápido que las "buenas" noticias son siempre las malas noticias. Me explico: en esta profesión, lo bueno no es noticia. Son precisamente las malas noticias: el número de muertos o heridos, los desparecidos, las guerras, los incendios, los terremotos, las que nos dan los grandes titulares, las que se consideran las "buenas" noticias. Gracias a Dios que nuestro portal no es un periódico. Por el contrario, MamásLatinas es el lugar donde nos reunimos cientos de miles de mujeres como tú y como yo a hablar de lo humano y lo divino. Y entonces podemos comentar cosas tan maravillosas como la que ocurrió en el vuelo 678 de US Airways y que para mí no es más queun milagro…
__Lee más en ¿Qué más?: __¡No vas a creer cuántas veces una abuela tuvo que resucitar a una bebita en pleno vuelo!
No me preguntes cómo, pero en ese vuelo que hacía la ruta Tampa (Florida) – Phoenix (Arizona), se presentó una emergencia. Un bebé venía a bordo y de pronto, de la nada, comenzó a ponerse morado. La criatura había dejado de respirar.
Uno de los pasajeros corrió a pedirle ayuda a una de las azafatas quien con la urgencia del caso se dirigió por los parlantes a todas las personas a bordo, preguntando si había alguien con entrenamiento médico porque tenían una situación a bordo que incluso ameritaba un aterrizaje de emergencia.
Por esas cosas de Dios, uno de los pasajeros, Garret Goodwin, no sólo sabe de resucitación cardiopulmonar, sino que es profesor de la táctica (CPR por sus siglas en inglés). Así que sin pensarlo dos veces hizo lo que había que hacer: puso al bebé en el piso, le aplicó presión en el pecho, comprobó que no tenía nada en la boca que estuviera obstruyendo su respiración, le dio respiración boca a boca, y no se detuvo en su esfuerzo hasta que la criaturita comenzó a reaccionar.
En otras palabras, Garret le salvó la vida a esta criatura y se convirtió en el héroe ¿o debo decir ángel? del vuelo 678 y donde ya se está hablando del "milagro del vuelo 678", y no sin razón. ¿Te imaginas la buena fortuna de que Garret estuviera a bordo de ese vuelo? Los pasajeros dicen que fue la mano de Dios quien lo puso ahí y yo estoy de acuerdo.
El capitán aterrizó de emergencia en el aeropuerto de Houston. El vuelo 678 llegó a su destino en Tampa con una hora de retraso. Muchos de los pasajeros que tenían que hacer conexiones con otros vuelos las perdieron, pero a nadie la importó. Así de grande fue la felicidad porque Garret estuvo allí, en el momento preciso y le salvó la vida al bebé.
Yo estoy muy impresionada, porque hace poco escribí la historia de esta criaturita que también dejó de respirar de la nada y también se salvó gracias a que le hicieron resucitación cardiopulmonar a tiempo. Después de ver estos dos casos, estoy considerando seriamente hacer un curso de CPR. No cuesta nada y puede evitar muertes innecesarias.
