Cuando uno se enamora se emboba. No hay una manera diplomático de decirlo. La persona en la que ponemos nuestra pasión y le entregamos nuestro corazón tiene una especie de poder mágico sobre nuestro cerebro, sobre todo el principio de la relación. En esa etapa creo que somos capaces de cometer las peores estupideces, entre ellas entregar el control total de la cartera. No sé porque, pero a los hombres esto les pasa menos, aunque ellos también se vuelven idiotas. Ahora, las mujeres casi todas nos da por ahí. Nos desentendemos de nuestras finanzas y entregamos una gran parte de nuestra independencia y seguridad económica. Mira las cosas más comúnes, a ver si te identificas y aprende a evitarlo, sin crear conflictos en la relación.
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¿A ver si alguna o todas estas afirmaciones te define?:
__1.- Tu pareja administra el dinero y tú no tienes idea de cuánto se paga en qué.
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Tengo una amiga que ciegamente entregó lo poquito que tenía a su marido. El hombre controlaba todo lo referente al dinero y ella pensaba que era una distribución de responsabildades adecuadas, pues ella estaba dedicada a la casa y a los niños. ¡Casi termina presa! El marido había usado su número de seguro social para sacar tarjetas de crédito a nombre de los dos, gastó lo impensable creando una deuda que ahora le toca pagar a ella. ¡Gran error! Tú tienes que saber tanto como él de las finanzas del hogar. ¿Qué haces si esta despilfarrando tu patrimonio y el de tus hijos. o peor aún si te quieres divorciar o te quedas viuda?
Sería sano que le sugirieras que quieres saber del las finanzas familiares para ayudarlo. Si se ofende, pónte dramática y dile que tienes miedo de qué pasaría si le pasa algo a él, pero lo más probable es que te lo agradezca. Los hombres que no tienen nada que ocultar se sienten aliviados de compartir esta responsabilidad.
__2.- Tienes poca o cero relación con la persona que les ayuda con el dinero
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Ya sea la cajera de tu banco, o mejor aún, el o la gerente. El dueño del lugar donde cobras los cheques o tu asesor financiero. No importa cuánto dinero tengas. Lo importante es que te enteres de cuánto es y como se gasta.
Si tu marido es de los que se pone mal cuando te involucras en esas cosas, visita a esa persona clave con algún regalito. Dile q es para agradecerle sus servicios y aprovecha para desarrollar una relación. Si no, dile a tu pareja que quieres ir con él la próxima vez.
__3.- No te gusta "molestar" con preguntas
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Diversos estudios, en culturas diferentes, han coincidido en que las mujeres son más tímidas a la hora de hablar de dinero y entender cómo se maneja. Yo creeo que es por eso que nos metieron en la cabeza desde chiquitas de que somos malas para los números. ¡Nada de eso amiga! Pide que te expliquen todo, y si no lo entiendes, que te lo expliquen otra vez o de otra manera. Es tu derecho y hasta tu obligación velar por ti misma y por tus hijos. No lo dejes en manos de nadie, así sea el amor de tu vida.
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