¿Soy sólo yo o la Navidad es la época más dura para estar lejos de nuestros países? Este es mi diciembre número 20 en Estados Unidos. Recién llegada me escapaba para pasar las fiestas en Venezuela, pero ahora somos cuatro y no siempre podemos costear los pasajes, pero eso no significa que nuestras familias se queden sin regalos de nuestra parte. ¡Eso jamás! Por eso me he hecho una experta en ver la forma más segura y barata de hacerles llegar un cariñito.
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La primera opción, pero no necesariamente la más barata, es la oficina de correos. Si quieres mandar tus regalos por esta vía, acuérdate que el peso es un factor importantísimo, pues los paquetes internacionales se cobran por libra. También te recomiendo asegurarte de que el correo en tu país sea confiable (en el mío no lo es) y de que no le vayan a cobrar doble impuesto a tu familia allí en las aduanas. Créeme, yo he cometido ese error más de una vez.
Parecido, pero más seguro, es usar una empresa privada de correo. Las más grandes como Fedex y UPS tienen servicios puerta a puerta y, en algunos casos, hasta entregan en 24 ó 48 horas, pero son carísimas. Si vas por los privados, te conviene averiguar si por tu zona hay una compañía pequeña que se dedique a llevar mercancía a tu país.
Una manera de ahorrarse el envío es comprar directamente en los sitios web de las tiendas del país donde está tu familia. Yo lo hago todo el tiempo y pido que dejen los productos en las tiendas y mis parientes los buscan allí.
Pero, en mi experiencia, la mejor opción es o mandarle dinero, o gift cards, a través de Internet. Mis sobrinos todos tienen un romance con sus iPods, iPhones e iPads, mandarles dinero para comprar en iTunes me ha convertido en la tía favorita desde hace un par de años. En otros países hay servicios de Amazon, como en España y en México.
Hoy en día las barreras se han reducido y el dinero se mueve más fácil. Acuérdate de mandar, lo que vayas a mandar ya. Sobre todo si son paquetes. Ya falta poco para que llegue Santa Claus.
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