Cuando se tienen deseos de salir adelante y de sobresalir no existen barreras físicas, ni mentales que lo impidan. Este es el caso de Jorge Dyksen, un muchachito de 16 años cuadripléjico que juega fútbol y lo hace muy bien, pues ya metió su primer gol. Jorge perdió sus brazo y sus piernas con apenas 14 meses de edad y está orgulloso de sí mismo porque esto no ha sido ningún impedimento para que lleve una vida "normal". Te contamos más sobre las causas por las cuales Jorge perdió sus extrimidades.
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Los brazos y las piernas de Jorge fueron amputadas luego de que sufriera una infección en la piel que previniera la circulación de la sangre a los dedos. Pero además tiene una linda historia de amor, ya que Jorge fue dado en adopción a la familia Dyksen meses antes de que cumpliera los 16 años y luego de un largo proceso de adopción. Su familia biológica aunque lo ama, no podía proporcionarle las prótesis y los recursos para que el pudiera crecer como un jovencito común y corriente.
Resulta que Jorge comenzó a jugar fútbol representando a su escuela Manchester Regional High School Junior que queda en Nueva Jersey y le ha ido muy bien. Recientemente, su equipo se enfrentó con el de la escuela Eastern Christian Eagles al que Jorge les metió un golazo por lo que tanto él como su entrenador se pusieron muy felices. Jorge espera seguir metiendo muchos goles más para su equipo en las próximos encuentros futbolísticos, reporta abc news.
Jorge desea convertirse en motivador profesional para dar conferencias alrededor del mundo sobre cómo hacer los sueños realidad. Mientras tanto desea seguir jugando fútbol y mantener su lema de nunca rendirse.
La historia de Jorge sirve de ejemplo a quienes se quejan por todo en la vida. Este jovencito tiene una gran fortaleza física y espiritual también, jamás se ha rendido y en lugar de tener una vida limitada, va en camino a convertirse en una estrella deportiva.
Estoy segura que Jorge dará mucho mas de que hablar en el futuro, porque supo como convertir una discapacidad en una fuente de alegría y prosperidad para su vida.
Imagen vía familia Dyksen