Gloria Estefan lo confirma: Trabajar con tu marido no es cosa fácil

¿Te imaginas que pases ocho horas en la oficina con la misma persona con la prepararás la cena y te vas a la cama? ¿Y que tus fines de semana también sean con el hombre con el que compartes el trabajo de lunes a viernes? Es decir, que no tienes alivio entre la jornada profesional y tu jornada como mamá y esposa y que ves a tu media naranja hasta en la sopa. No está fácil. Y lo confirma nada más y nada menos que Gloria Estefan.

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Gloria sabe de lo que está hablando porque Emilio, su marido y padre de sus hijos, fue quien la descubrió y es además su productor de toda la vida. Pero además todos sabemos que donde Emilio pone el ojo pone la bala y que como un auténtico rey Midas del espectáculo, todo lo que toca lo convierte en oro, o mejor dicho múltiples álbumes de platino. O sea que Emilio se las trae y estoy segura de que su éxito está relacionado con el profesionalismo y este a su vez con disciplina y rigor.

Por eso Gloria confiesa que aún después de todos estos años le cuesta manejar la doble relación que tiene con Emilio: cuando no están en el estudio de grabación, está en la alcoba con la misma persona que supervisa la producción de cada uno de sus discos. Cuando no, están en la cocina desayunando, están de gira. Y por eso es tan difícil desenchufarse del trabajo y de la música.

Sé lo que es eso por que fui socia de mi ex esposo en una aventura profesional de la que no quiero acordarme. No diría que por eso terminó el matrimonio, pero sí contribuyó un montón. Cuando me tocó trabajar con quien creí era mi otra mitad me di cuenta de lo diferentes que éramos y de que teníamos visiones del negocio y de la vida misma no sólo distintas sino incluso muy difíciles de compatibilizar.

Lo pasado, pasado y a lo hecho, pecho. Pero lo cierto es que hay que tener mucho cuidado con los negocios entre parejas porque las cosas se complican y a lo mejor terminas sin el negocio y sin el novio o sin el esposo.  Esto no quiere decir que no hayan casos exitosos, como el de Gloria y Emilio. Incluso he visto parejas que trabajan juntos como empleados de una misma empresa u organización y son felices, o por lo menos eso aparentan.

Pero diría que son las excepciones porque es bien difícil no sólo compartir la familia y los ratos de ocio y esparcimiento, sino también la vida laboral y profesional con la misma persona.

Imagen vía Getty