Si prestas un poco de atención a cómo hablas y cómo lo hacen las mujeres que te rodean es probable que notes que a menudo tanto tú como ellas terminan las oraciones elevando el tono como si hicieran una pregunta. (Por ejemplo: ¿Creo que tendríamos que cambiar de proveedor?)
Es tan común esta modalidad de expresión que ya ni la notas. Pero la realidad es que le quita convicción a lo que dices y te muestra como poco segura de ti misma. Ni que hablar de cómo pierdes autoridad frente a los demás.
Ahora enfócate en los hombres que te rodean y en las mujeres de mayor jerarquía en tu entorno y lo más probable es que, a menos que estén preguntando algo, escuches afirmaciones. (Ejemplo: Creo que tenemos que cambiar de proveedor.)
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Si quieres llegar al próximo nivel no te quedará otra que ajustar ya mismo algunos detalles que harán que tus supervisores te vean como la mujer exitosa que quieres ser.
Aquí van algunas ideas que siempre me han funcionado bien:
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Empieza a escucharte para tener claro cuál es tu estilo. También puedes pedirle a una amiga o colega que te ayude a identificar cuando subes el tono al final de una oración que no es una pregunta sino una afirmación.
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Trata de practicar trasmitir tus ideas con claridad y sin enrollarte en detalles secundarios para que de esta manera logres inspirar a tus compañeros a seguirte. Tener un estilo de comunicación claro y conciso es clave para escalar en cualquier trabajo.
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Establece, expresa y cumple tus objetivos. Nada más importante para convertirte en jefa que demostrar que puedes ponerte metas, transmitirlas con claridad y cumplirlas en el tiempo establecido. Y si también puedes ayudar a tus compañeros a cumplir las suyas, ¡mucho mejor!
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Controla el volumen de voz. Fíjate que los supervisores más respetados tienden a hablar en un tono firme pero sin levantar la voz. Como latinas solemos hablar fuerte y esto puede mostrarte como alguien que no puede controlar sus emociones, una percepción que deberás superar si quieres esa promoción.
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Modula tu pasión. No abandones tu personalidad pero ajusta tu pasión al ambiente en el que te mueves. Si trabajas con anglosajones, te convendrá bajar un poco tu intensidad ya que esa pasión que tanto nos caracteriza también se percibe como falta de control emocional. Esto incluye los gestos excesivos con las manos y la cara.
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Controla tu comunicación no verbal. Aún cuando estás callada tu cuerpo está comunicando por medio de tu postura, de gestos casi imperceptibles, de tus suspiros, etc. Cuanto más subes de posición, mayor control debes ejercer sobre lo que comunicas todo el tiempo.
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Si vives en Estados Unidos mejora tu inglés. No olvides que aprender bien el idioma de negocios de este país es una de las mejores maneras de abrirte puertas para crecer en el trabajo.
¿Qué otras cosas notas de la manera en que se expresan las personas que tienen el tipo de puesto al que tú aspiras?
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