__Hay historias de amor y esta que te voy a contar. Se trata de Ben Pike, jugador de fútbol americano de los Rockets de la Universidad de Toledo, quien acaba de renunciar a una promisoria carrera deportiva para cuidar a su prometida, Ashlee Barrett, quien padece de leucemia y está esperando por un trasplante de médula ósea.
En diciembre de 2011, Ben se comprometió con Ashlee, quien ha estado batallando contra la leucemia desde abril de 2012. Acaba de colgar sus protectores y el casco de jugador de fútbol para dedicarse a cuidar al amor de su vida. La pareja tiene planeado casarse en junio de este año, después del trasplante de médula al que será sometida Ashlee.
Luego se someterse a un tratamiento con quimioterapia, hace un mes a Ashlee le dieron la noticia de que la leucemia había vuelto. Fue cuando Ben decidió renunciar al fútbol para cuidarla. Pero como dice la mamá Ben, no está renunciando a nada: en realidad lo que está es peleando por la vida. Y yo digo que con una mamá así, no hay manera de que Ben no sea la persona extraordinaria que es.
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Historias como esta me reconfortan y me devuelven la fe en el ser humano. Por eso digo que el cuando el amor es verdadero no conoce de miedo ni de desesperanza. Ben dice que Ashleet es para él una fuente de inspiración. Yo espero que ahora él sea fuente de inspiración para muchos.
En lo que termine la universidad, ahora en mayo, este hombre enamorado se mudará a St. Louis, en Missouri, donde vive su amada, a quien por ahora visita los fines de semana.
Creo que Ben tiene el cielo ganado y Ashlee sólo tiene para él palabras de agradecimiento: "sin Ben –asegura- no se como hubiera hecho en todo este proceso". Que Dios los bendiga a los dos y que salgan vencedores de este trecho.
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