Siempre digo que todo es según el color del cristal con que se mira y hasta en los peores momentos de mi vida cuando alguien me pregunta cómo estoy, mi respuesta siempre es, invariablemente: "esperando un día malo, para ver cómo es eso". Ha de ser que soy una optimista empedernida y que además creo que uno se hace su propio destino. Pero además soy de las que piensa que el espejo tiene dos caras.
Por eso cuando escribí mi guía para sobrevivir a Mercurio cuando está en retrógrado, me quedé pensando en qué cosas buenas puede traer el hecho de que este planeta que rige las comunicaciones, el comercio y los medios de transporte, nos enrede la vida cuando, como ahora, retrograda.
Así que resolví compartir contigo la vuelta positiva que le estoy danto al hecho de que mi laptop sigue enloquecida, la mitad de mi casa sigue sin internet y hasta escribir un post me toma tres y cuatro veces más de lo normal, todo gracias a que Mercurio está en retrógrado.
Como no soy astróloga ni me interesa la astrología en particular, escribo desde mi experiencia personalísima en la esperanza de que esta reflexión pueda ayudarte a ti y otras mamás latinas como tú y como yo, en este "tránsito planetario".
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Sabiendo que Mercurio estará en retrógrado hasta el 26 de noviembre, creo que es importante no luchar contra la corriente y en cambio dejar que todo fluya y tomar algunas precauciones.
Para evitar llegar tarde a tu trabajo o a una cita, trata de salir más temprano y así evitas contratiempos. Ten presente que todas las comunicaciones, cara a cara, telefónicas, a través de las redes sociales, se complican y los malos entendidos están a flor de piel, así que trata de evitarlos a toda costa.
Aprovecha que los retrógrados de Mercurio son período especialmente buenos para cerrar ciclos, separaciones, para hacer limpiezas: de closets, de casas, para liberarte de lo que te estorba física, psicológica y emocionalmente, y también para planificar tu futuro, eso sí manteniendo siempre tus planes en reserva hasta que pase el retrógrado.
Los retrógrados de Mercurio son especialmente buenos para re-pesar, re-considerar, re-ciclar, re-evaluar e incluso re-dimensionar situaciones y relaciones que requieren de tu atención. Si como en mi caso, el internet, el teléfono o la computadora dejan de funcionar o no funcionan adecuadamente, pues a lo mejor es que necesitas desconectarte: revisar, reflexionar y retirarte para pensar y planificar.
Tal vez esta sea la ocasión para poner las cosas en perspectiva y darle un nuevo impulso a tu vida, eso sí a partir del 26 de este mes cuando Mercurio salga de su retrógrado.
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