¿Quieres mejorar tu autoestima de una manera divertida y deliciosa? Atrévete a expresar la mujer maravillosa que palpita en tu corazón mediante el baile. El baile ofrece numerosos beneficios para tu salud física y emocional. La experiencia en sí de bailar, no importa qué tipo de baile sea, despierta sentimientos positivos que fortalecen tu autoestima y confianza en ti misma.
Bailar te da la oportunidad de expresar a tu yo verdadero y de liberar a tu Diosa Interior. Cuando bailas te pones en contacto con tu cuerpo y tu alma. Sientes tu belleza auténtica y te sanas de los complejos que te hacen sentir fea e inadecuada.
No importa tu edad, ni tu talla ni la forma de tu cuerpo, tú puedes bailar para liberar a tu Diosa Interior. Te invito a que empieces este mágico camino haciendo la ceremonia "Baila a tu Diosa", una danza del Sistema CuerpoAdentro que puedes hacer a solas en la privacidad de tu hogar. Aquí explico esta ceremonia paso paso.
Ceremonia "Despierta a tu Diosa"
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A la Diosa hay que darle tiempo y espacio. El primer paso es sacar al menos 20 minutos para hacer esta ceremonia y escoger un espacio lleno de belleza y armonía adonde puedas moverte con libertad.
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Tu Diosa se nutre mediante todos los sentidos. Por eso, es importante que escojas un atuendo hermoso de texturas suaves y en colores que complazcan tu alma. Busca un atuendo en el que te sientas hermosa y cómoda. Ponte tu aroma favorito. Quédate descalza (asegúrate de que el suelo esté a una temperatura agradable).
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Selecciona una música instrumental que despierte en ti sentimientos de armonía, placer y amor. Una música de tambor puede ayudar a despertar tu conexión con la tierra y el fuego. Una música de guitarra o de violín ayuda a abrir el chakra del corazón. Lo más importante es que a ti te encante la música selecionada.
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Ahora ya estás vestida con tu atuendo de Diosa y hueles exquisitamente bien. Pon la música. Ponte de pie en el centro del espacio y cierra los ojos.
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Escucha la música con tu alma. Deja que la vibración de cada nota musical acaricie todo tu cuerpo.
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Las notas musicales entran por tus pies, suben por tus piernas y llegan hasta tu pelvis y caderas. Desde tu pelvis y caderas, empiezas a moverte a tu propio ritmo, suavemente, sin empujar ni tratar de formar nada. Este es tu baile y solamente tú sabes bailarlo.
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Poco a poco las notas musicales penetran a todo tu cuerpo despertando la danza en tus brazos, en tus manos, en tu pecho, en tu cabeza.
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Tu mente está en silencio y tu cuerpo responde a la música siguiendo tu propio ritmo. No tienes que seguir ningún patrón de baile conocido ni definido, porque el baile nace de tus adentros, de tu cuerpo y alma.
Disfruta de tu baile, disfruta de tu gracia, disfruta a tu Diosa Interior. Cuéntame cómo te va y si tienes alguna pregunta o duda, déjame un comentario aquí.
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Imagen vía Thinkstock
