La Diosa Interior que habita dentro de cada una de nosotras es una mujer sabia. Es una mujer que baila con la vida en total armonía dando y recibiendo amor. La Diosa Interior sabe que ella es una fuerza vital en el Universo y por eso conoce los secretos de la felicidad.
Cuando vivimos ajetreadas y estresadas, nuestra Diosa Interior se marchita y perdemos la habilidad de ser felices. En cambio, cuando nos sentimos a gusto y nuestras emociones son placenteras, nuestros átomos vibran en patrones armoniosos. Esa armonía se refleja en nuestro estado de ánimo, en nuestro nivel de motivación y alegría, incluso en nuestra belleza. Esa armonía despierta a nuestra Diosa Interior.
Empieza a nutrir tu armonía y a despertar a tu Diosa Interior en tu diario vivir con estas 5 acciones sencillas:
Silencio: El ruido es una de las principales fuentes de estrés. Saca al menos 15 minutos al día para estar en silencio total. Escoge un espacio tranquilo, pon tu atención en la respiración y disfruta del momento presente.
Naturaleza: Los árboles, el mar, el río, el cielo, los atardeceres y los jardines nos llenan de vitalidad y nos ponen en contacto con la energía sagrada de la Diosa Interior. Sal a caminar al parque entre los árboles, siéntate en una piedra a contemplar el cielo, deléitate con la belleza de las flores, escoge un lugar para disfrutar del atardecer.
Relajación: Date al menos una experiencia de relajación todos los días. Es muy fácil. Escucha música que tranquilice tu mente. Baila tu ritmo favorito. Haz una cita con la masajista, date un baño aromático o escucha una meditación guiada.
Presencia: Al despertar por la mañana, en vez de pensar en las tareas que debes completar ese día, quédate un par de minutos en la cama con los ojos cerrados. Siente la calidez de tu lecho en todo el cuerpo. Abrázate tu misma. ¡Estás recibiendo el abrazo de la vida! Si tienes pareja, comparte el abrazo con él o ella.
Gratitud hacia tu cuerpo: Honra tu cuerpo con un sencillo acto de gratitud todos los días. Saca un momento de quietud y dale las gracias a tu cuerpo, desde tus pies hasta tu cabeza.
¡Que tu Diosa Interior alumbre todos tus días!
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Imagen vía Thinkstock
