El caso de María José Cristerna, mejor conocida como "La mujer vampiro" es una historia impactante pero al mismo tiempo muy inspiradora. Es muy probable, que quienes la ven por primera vez, piensen que María José está loca, que es una pandillera -por los tatuajes y piercings que cubren su cuerpo- y que lo más seguro es que pertenezca a una secta satánica, por su afán en parecerse a un vampiro. Pero lo que pocos se imaginan es que detrás de ese "rudo disfraz" hay una persona de carne y hueso, que no sólo se considera católica, sino que además, ha decidido lucir así, tras haber sido víctima de violencia doméstica.
Y es que como lo ha declarado en algunos medios, sus tatuajes son una manera de liberarse de un pasado lleno de abusos. Y sus cuernos (implantes de titanio que tiene en el cráneo) y piercings son un símbolo de fuerza, que ahora la ayudan a transmitir un mensaje de aliento y esperanza a todas las mujeres que han sido víctimas de abuso doméstico.
Y es que, contrario a lo que podría pensarse a primera vista, esta mexicana tiene todas las herramientas para luchar por todas estas mujeres, y no lo digo por sus cuernos y colmillos implantados, sino por su preparación académica. Aunque no lo creas, María José no sólo se dedica al tatuaje profesional, sino que además, es abogada de profesión. Y por si eso fuera poco, es una exitosa mujer de negocios, que administra una tienda de tatuajes, joyería y ropa.
¿Algo más? Aunque tenga una apariencia de "pocos amigos", María José es madre de cuatro hijos y cuenta en una entrevista concedida al periódico El Universal, que su rutina diaria es llevarlos a la escuela, darle de desayunar a su marido y programar sus actividades de trabajo, para luego regresar a casa a ayudarle a sus hijos a hacer la tarea y darles de comer a sus mascotas.
En fin, no cabe duda que como dice el dicho "las apariencias engañan" y María José Cristerna es el claro ejemplo de que antes de juzgar a una persona, tienes que darte la oportunidad de conocerla más a fondo, ya que el interior de un ser humano es lo que finalmente cuenta y no cabe duda que una vez que conoces a la verdadera "Mujer vampiro" lo último que puedes sentir es miedo o repulsión.
Imagen vía El Universal