El nivel de pasión, disposición o excitación que sientes en tus encuentros íntimos, no siempre es proporcional al nivel de disfrute o placer. Muchas mujeres pueden padecer dolor durante las relaciones sexuales y en ocasiones ni siquiera saben la causa o por qué les pasa. Si es tu caso, ten presente que tu vida sexual no tiene por qué sufrir consecuencias. Descubre la razón del dolor, toma nota de estas opciones y no dudes ni tantito en consultarlo con tu especialista.
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Te cuento que según algunas investigaciones, una de cada diez mujeres sexualmente activas, han tenido dolor durante las relaciones sexuales al menos una vez en su vida. Es evidente que la incomodidad puede alterar tu desempeño en la cama, así que busca formas de encontrar tu equilibrio para disfrutarlo.
El dolor en cualquier parte de nuestro cuerpo, siempre va a indicar que algo está pasando. Si tus relaciones sexuales se han vuelto dolorosas o molestas, al grado que te impiden sentirte entregada e incluso hasta querer evitarlas, es importante que te cheques. No te acostumbres a vivirlo así, no es normal y además a la larga tu salud física y tu relación de pareja pueden verse afectadas.
Resequedad vaginal que como consecuencia produce irritación o ardor.
Cuando no hay suficiente lubricación, la fricción puede generar mucho dolor. Es entonces cuando lejos de resultar placentero, puede resultarte incómodo y poco disfrutable. En este caso la solución es que uses un lubricante, no sin antes consultar con tu ginecólogo.
Porque tus hábitos sexuales podrían favorecer las infecciones e inflamaciones constates.
Cuestiones como tener relaciones sexuales durante la menstruación o el uso excesivo de lubricantes entre otras tantas, podrían ser un factor de riesgo para contraer infecciones que después contribuyen al dolor.
Porque los preservativos podrían estarte provocando una alergia y tú ni lo imaginas.
Es posible que seas alérgica al látex-material del que está hecho el condón- y que tu piel lo esté rechazando. El roce, la irritación y como consecuencia la posible inflamación, podrían convertir la relación sexual en todo un calvario.
Porque estás tomando algunos medicamentos que afectan tu lubricación natural.
Algunos antihistamínicos y antidepresivos e incluso algunos anticonceptivos, tienen como efecto secundario la sequedad vaginal. En estos casos, el dolor en la relación sexual e incluso desequilibrios en la libido puede aparecer.
Porque practicas con frecuencia ciertas posiciones sexuales que pueden ser dolorosas.
La penetración en sí misma puede causar un poco de dolor; sin embargo cuando las posiciones en tu práctica sexual lo favorecen, o el sexo es tan apasionado que sin querer se lesionan mutuamente, en definitiva eso te dejará huellas que a la larga tu cuerpo te cobrará con dolor.
Porque tienes una la vejiga inflamada por una posible infección.
Si sientes ardor al orinar, pérdida de apetito sexual y dolor en la relación sexual, lo más probable es que tengas una cistitis que es el nombre médico que le dan a la infección de vías urinarias. Así que corre de inmediato con tu médico para que tomes el tratamiento adecuado.
Porque los problemas con tu pareja rompen con tu deseo sexual y la química del encuentro se detiene.
Cuando te sientes excitada y suficiente estimulada por tu pareja, indiscutiblemente tu organismo reacciona y provocará la lubricación para que la relación sexual sea placentera. Si no estás conectada con tu pareja, al contrario, la relación sexual puede resultar molesta.
Porque estás viviendo tu primer encuentro sexual.
La primera experiencia en una relación sexual puede resultar dolorosa debido al estrés o ansiedad que puede producir lo desconocido. De hecho, algunos especialistas en la materia sugieren ciertas posiciones para que tu primer encuentro sea pleno y libre de dolor.