Hay cosas que adoro de la modernidad, ya que la tecnología ha simplificado nuestros acelerados días como mamás y amas de casa. Pero no todo es miel sobre hojuelas, porque la miel puede convertirse en veneno cuando descubres que abusar de la tecnología provoca daños en la salud y el horno microondas entra dentro de la lista negra. Te cuento por qué.
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Reduce los nutrientes de los alimentos
Se ha dicho que es un mito, sin embargo en un estudio publicado por la Revista de la Ciencia y de la Alimentación en la Agricultura se menciona que el brócoli cocido pierde hasta un 90% de antioxidantes, e incluso calentar la lecha materna, reduce sus propiedades inmunológicas.
Es un nido de bacterias
Tus alimentos no se cuecen por completo y los microorganismos sobreviven en la comida causándote malestares intestinales. Así que deja reposar unos minutos antes de sacarla del horno para que el calor se distribuya y mate a las bacterias por completo.
Los alimentos se deshidratan
Las ondas electromagnéticas provocan que el agua contenida en los alimentos se evapore mucho más rápido y tus alimentos tomarán consistencia chiclosa. Lo recomendable es que pongas un vaso de agua al calentarlos.
Reducen los niveles de Vitamina B12
Un investigador japonés llamado Funio Watanabe, descubrió que la carne y la leche perdían hasta un 40% de esta vitamina la cual es muy importante para la formación de las células y los glóbulos rojos.
Usar plástico para calentar es riesgoso
El doctor Edgar Fugimoto, gerente del Programa de Bienestar en el Hospital Castle de la Universidad John Hopkins, explica que el plástico genera dioxinas que dañan a tu cuerpo porque son agentes tóxicos que pueden causar cáncer.
Debilita el sistema inmunológico
Un estudio suizo dirigido por el biólogo Hans Hertel estableció que no hay atomos, moléculas o celulas de cualquier sistema organico capaz de soportar una potencia tan violenta y destructiva durante un periodo prolongado de tiempo.
Crea compuestos radio líticos
Son compuestos que no se encuentran en el organismo del ser humano ni en la naturaleza y se dan como efecto de los procesos electromagnéticos. Los aminoácidos se destruyen y los alimentos pueden volverse tóxicos para el organismo.
La comida pierde su sabor original
Según una investigación realizada en El Cairo por el Departamento de Química y Sabor del Centro Nacional de Investigación Tahrir St. Dokki, no hay un calentamiento uniforme y muchos químicos no se evaporan por lo que tiene efectos en el sabor.