Es que es tan delicioso que, honestamente, nos parece imposible relacionarlo con lo saludable, pero no es cuestión de fantasías. Estudios recientes demuestran los múltiples beneficios del cacao para el organismo. Lo único que debes tomar en cuenta es cómo y cuándo ingerirlo, para así sacarle el mayor provecho. Aquí van algunos de sus beneficios.
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Imagen vía Corbis
Propiedades antioxidantes
Una fuente inagotable de juventud que previene cáncer, cardiopatía, y dificultades de la visión, entre otros padecimientos.
Alto contenido de magnesio
El cacao contiene este mineral, que es vital para mantener la salud de tus huesos y del aparato circulatorio.
Regulador natural del humor
Cuando comes chocolate, en especial, aquel con alto contenido de cacao, y menos azúcar y leche, puedes sentirte más feliz. No es solo una sensación.
Afrodisíaco
Aunque no está comprobado del todo, muchos alegan que el cacao tiene una estrecha relación con el amor por ser afrodisíaco. Ya sabemos, entonces, por qué los enamorados regalan chocolate en San Valentín.
Baja el nivel de azúcar
Consumir polvo de cacao amargo, impide que el azúcar en tu sangre aumente de manera radical. Asimismo, protege los vasos sanguíneos de tu cerebro, el corazón, los riñones, los ojos y los pies.
Disminuye el colesterol malo
Consumir chocolate negro, que contenga más de 70 por ciento de cacao, baja los niveles del colesterol malo y aumenta el bueno.
Contrarresta el deterioro cognitivo
Diversos estudios concluyen que el cacao mejora la función cerebral, ya que es rico en flavonoides.
Diurético
Tus riñones también te agradecerán el consumo de cacao, pues está comprobado que su ingesta estimula la producción de orina.
