Déjame empezar el artículo confesando que yo tengo el mal hábito de arrancarme los pellejos de las uñas con los dientes. Como todo mal hábito un día apareció y no se ha ido, pero hoy tomé la decisión de dejar de hacerlo porque es muy malo para mi salud y el aspecto de mis manos. La verdad es que no tenía ni idea de todas las cosas malísimas que suceden al comerse las uñas o los pellejos así que sigue leyendo para que veas cuáles son. Te prometo que no vas a quedar con ganas ni de chuparte los dedos.
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1. Produce infecciones bucales: La boca es el órgano más sucio de nuestro cuerpo porque allí están presentes miles de bacterias que normalmente no son dañinas. Cuando estas bacterias se combinan con las bacterias que tengamos por debajo de nuestras uñas, la mezcla puede ser letal. Se producen llagas, herpes y si tienes alguna carie hasta se puede llenar de materia.
2. Daña los dientes: Aunque no lo creas, las uñas son muy duras para los dientes. Cada vez que te comes las uñas, los dientes trabajan muy duro para morderlas y arrancarlas. Muchas veces terminan quebrando los dientes y dañando su superficie.
3. Se transmiten verrugas contagiosas: Las verrugas normalmente aparecen por producto de un virus y es una condición muy común en las personas que meten los dedos en sus bocas. Estas verrugas duelen y son difíciles de eliminar especialmente dentro de la boca.
4. Transforma la textura de la uñas: No sólo se ven feas sino que con el tiempo las uñas dejan de crecer ya que no tienen raíz. Así como lo oyes, a diferencia del cabello, las uñas necesitan de unas puntas sanas, llenas de keratina para poder crecer.
5. Genera problemas estomacales: Tocamos todo con las manos y muchas veces no tenemos la disciplina de lavar bien las manos sobre todo por debajo de las uñas. Personas que se comen las uñas y los pellejos sufren de problemas estomacales porque se tragan los gérmenes. ¡Qué asco!
Imagen vía Corbis
