A los latinos se nos conoce en el mundo entero como gente parrandera, alegre, que busca cualquier excusa para celebrar. Y tu y yo sabemos que fiesta o reunión sin tragos, no es fiesta, ni reunión, ni nada. Yo misma me la paso recomendando aquí tragos y cócteles para todo momento y ocasión. Trabajé por casi 15 años en la industria licorera y tengo un blog de cocina en el que 10% de las recetas son de tragos y cócteles. Pero jamás (y lo puedo jurar sobre una Biblia) me he emborrachado y puedo pasar meses sin probar un trago. Sin embargo, se lo terrible que es el alcoholismo porque he convivido con alcohólicos y se me prenden todas las alarmas cuando veo algunos síntomas (que para la mayoría de las personas no significan nada) de lo que puede ser una persona que sabiéndolo o no, tiene problemas con el alcohol.
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Según el Instituto Nacional de Abuso del Alcohol y Alcoholismo, cada día más mujeres bebemos más y con mayor frecuencia. Pero solo 9% de las mujeres que beben excesivamente (que se toman ocho o más tragos por semana, o cuatro o más tragos en una sola sentada) son diagnosticadas con trastorno severo por consumo de alcohol.
La mayoría de las personas que sufren de este trastorno sea leve o no manejan borrachas o pierden sus trabajos. Sin embargo, eso no significa que no tengan problemas. Mira la lista que elaboré para que sepas si tu o alguna persona cercana a ti, está bebiendo demasiado y tiene problemas con el alcohol:
1. Cuando sales del trabajo, necesitas tomarte un trago para relajarte.
2. Cuando estás preparando la cena, te sirves una copa de vino o te tomas una cerveza helada.
3. Cuando estás estresada, en lo primero que piensas es en un trago para liberar tensiones.
4. Cuando sales a comer con tus amigas y amigos, no concibes el almuerzo o la cena sin un trago.
5. Cuando sales a divertirte en lo primero que piensas es en un trago.
6. Cuando estás triste, cansada o desanimada, recurres al alcohol para "darte ánimo" y levantarte el espíritu.
7. Te apetece un trago durante el día e incluso antes del almuerzo (y no estoy hablando de las mimosas o los bellinis que solemos tomar en un "brunch" dominical en ocasiones especiales).
8. Cuando te provoca un trago, no te importa si estás sola o acompañada (bebes sola).
9. Te tomas ocho o más tragos por semana.
10. Te tomas cuatro o más tragos en una ocasión.
11. Para ti los fines de semanas son para beber.
12. Cuando intentas dejar de beber no puedes.
13. Cuando estás bebiendo no puedes parar.
14. Cuando no puedes dormir te tomas un trago o dos.
15. Bebes en secreto y escondes las botellas, en otras palabras: mientes sobre tu consumo de alcohol.
16. Tus seres queridos se preocupan porque estás bebiendo mucho y con demasiada frecuencia.
17. Cuando bebes pierdes la noción de lo que verdaderamente es importante para ti, por ejemplo se te olvida ir a la clase de zumba, faltas al trabajo, etc.
18. Cuando te emborrachas, hay veces en que pierdes temporalmente la memoria e incluso has tenido bloqueos ("black outs") y al día siguiente no te acuerdas de nada.
19. Cuando bebes te desinhibes y haces cosas que de lo contrario jamás harías.
20. Se te enrojece la piel del rostro y comienza a aparecerte vasitos capilares rotos en la cara.
21. Te tiemblan las manos y el pulso.
22. Sufres de ansiedad, insomnio y nauseas cuando no bebes.
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