Si hacemos una encuesta, estoy segura de que la mayoría de las mujeres van a decir que quieren bajar unas libritas de más. No importa cuál sea la talla que usen, muy pocas estamos completamente a gusto con nuestro cuerpo y peso. Es por eso que la industria de las dietas se ha vuelto multimillonaria en los últimos años. Hoy en día hay de todo para adelgazar y en este instante muchas compañías están inventando un producto, píldora o poción mágica para derretir la grasa en un instante. Cuidado, porque algunas de estas técnicas son peligrosas tanto para la salud como el cuerpo. Sigue leyendo para que aprendas cuáles son.
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1. Píldoras: Hay muchas píldoras para adelgazar en el mercado y todas pueden ser dañinas. El problema con estas pastillas es que no están reguladas por el departamento de salud ya que como las vitaminas hacen parte de la medicina bioenergética. Muchas de estas píldoras funcionan como si fueran un globo en el estómago. Cuando la persona se las toma, la pastilla se infla y hace que la persona se sienta llena.
2. Fajas para entrenar la cintura: Estas fajas son la última locura de las famosas, pero ten mucho cuidado porque puedes terminar más gorda. La faja hace que la grasa se redistribuya en otros lugares del abdomen y vas a terminar con una llanta más arriba y otra por abajo de la barriga.
3. Prendas íntimas moldeadoras: El problema con estas prendas íntimas es que son muy ajustadas. Estas prendas tienden a comprimir los órganos y ocasionan problemas en el organismo. No se recomiendan usar estas prendas a largo plazo para que no alteres la anatomía interna de tu cuerpo.
4. Dieta líquida: Los jugos desintoxicantes son buenos para tomar en ayunas o antes de dormir pero no son un sustito de las comidas. Si únicamente tomas tus alimentos, corres el riesgo de terminar desnutrida. El organismo necesita alimentos sólidos para poder funcionar adecuadamente.
5. Dejar de comer: No tengo que entrar en detalles y explicar lo serio que es este tipo de dieta. Corres el riesgo de deshidratar, desnutrir y transformar la anatomía de tus órganos. Al no recibir alimentos, el estómago, los intestinos y el hígado entran en mecanismo de emergencia y usan todas las reservas del organismo. Además puedes fácilmente caer en la anoréxia.
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