¡La berenjena es maravillosa! Eso seguramente ya lo sabes porque sus aportes a la salud no tienen desperdicio. Sin embargo, hay un secreto que probablemente desconozcas sobre su uso: tomar el agua de esta hortaliza reducirá el exceso de grasa en el organismo. Particularmente, en la zona abdominal que cuesta tanto mantener plana.
¡Aprende a prepararla tú misma y saca ventaja de sus múltiples beneficios!
Lee más en ¿Qué más?: Agua de limón y pepino para bajar de peso rapidísimo
Entre las grandes propiedades de la berenjena, debo mencionar que contiene 93 por ciento de agua y gran cantidad de fibra natural, lo cual la convierte en un potente adelgazante. Sucede que al consumirla, te sentirás satisfecha con facilidad y a diferencia de otros alimentos, no te engordará.
Debes tener presente que la berenjena jamás debe consumirse cruda, pues puede resultar tóxica. Lo más indicado si quieres rebajar es que la cocines de las maneras menos grasosas posibles: hervida, asada u horneada. Si estás pensando en deshacerte de las libritas extra, qué mejor que hacerlo con la versión líquida de este gran alimento proveniente de la India: el agua de berenjena.
Te digo de antemano que prepararla es la cosa más sencilla de este mundo, y cuando compares el pequeño esfuerzo que harás con el provecho que le puedes sacar, notarás que bien habrá valido la pena.
Varios portales especializados en salud recomiendan tomarla durante seis a siete días seguidos por mes, con el propósito firme de adelgazar, depurar tu organismo e ir al baño regularmente. Además, estarás recibiendo un importante aporte de vitaminas, minerales, calcio, y encontrarás un aliado para quemar las grasas dañinas que hayas acumulado en el cuerpo.
Para que el agua de berenjena resulte más efectiva, debes comer sano y ejercitarte durante las jornadas que la bebas. Específicamente antes de tus dos comidas primordiales, que son el desayuno y el almuerzo. La reacción del organismo será muy favorecedora, pues estarás contribuyendo a tu nutrición, depurándote y por si fuera poco, combatiendo esa odiosa grasa que se concentra en el área del abdomen.
¡Toma nota de la receta! Compra berenjenas frescas, y elige una por preparación. Lávala bien, quítale la concha y luego procede a cortarla en trozos en forma de cubos o rodajas medianas. Ponlas en un envase de vidrio con medio litro de agua y déjalas macerar dentro de la nevera. Permíteles reposar durante toda la noche y a la mañana siguiente, ya estará lista para ser servida.
Si quieres añadirle sabor y otro ingrediente antioxidante, colócale jugo de limón, revuélvelo y si lo prefieres agrégale un poco de hielo. Conocerás una manera muy refrescante de adelgazar, sintiéndote súper orgullosa de tu abdomen. ¡Cuéntame cómo te va con ésta agua magnífica, que ha ayudado a tantas otras mujeres a estar en forma!
Imagen vía Thinkstock
