No es una exageración decir que buena parte del mundo no podría funcionar correctamente sin al menos una taza de café al día. Pero poco sabemos sobre qué hacer con la borra del café, esos gránulos usados que, creas o no, le van de maravilla a cosas tan diversas como la piel de tu rostro o esa planta que acabas de comprar. Es en serio, el café que queda en el filtro de la cafetera o en las capsulitas individuales es súper útil para muchas cosas. Aquí te compartimos algunos cosas que ni te imaginabas que puedes hacer con el café.
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Seguro que tu abuelita y tu mamá tienen varias ideas sobre cómo aprovechar la borra del café y hasta el café colado. Sin embargo, para que no pierdas el tiempo dilucidando qué es mito y qué es verdad, hemos recopilado sus mejores usos en el mantenimiento de la casa y en tu rutina de belleza. Así que no te olvides agregar el café en tu lista cuando vayas al supermercado.
Parece mentira que algo que usualmente termina en la basura pueda tener tantos usos diferentes, que no solo te van a ahorrar tiempo y dinero, sino que van a hacerte los quehaceres del hogar más fácil y te van a dejar más bella que nunca. Toma nota y empieza desde ya a aprovechar al máximo los beneficios del café, que van mucho más allás de ayudar a despertarte y activar tu cerebro.
Como exfoliante para el cuerpo, la borra del café es casi mágica.
La borra del café es fantástica para lograr una piel tan suave como la de un bebé. Basta con humedecerla y aplicarla con movimientos circulares una o dos veces por semana… ¡Notarás la diferencia enseguida!
El café es un aliado maravilloso en la lucha contra la celulitis.
Como el café es un vaso constrictor, ayuda a reducir la apariencia de los huequitos en las piernas.
Realza el color de tu cabello si eres castaña.
Coloca la borra en el acondicionador que usas normalmente y después de sacarte el champú, aplícatelo y déjatelo en el cabello por unos cinco minutos.
Si tu cabello está reseco y sin vida, prueba enjuagarlo con café.
Mezcla dos cucharaditas de café molido en un vaso de agua fría y luego de lavarte el pelo, vierte la solución haciendo énfasis en las puntas. Espera 20 minutos y retira. ¡Milagroso!
Las várices mejorarán tras un masaje con café.
Haz una mezcla con un producto emulsionante, como aceite de bebés o de oliva. Mezcla el café, aplícatela sobre las venas varicosas y déjala unos 10 minutos. Lo mejor es hacerlo antes de bañarte.
Una mascarilla exfoliadora de café es mejor que muchas de marca.
Los gránulos del café ayudan a limpiar la piel, y sus poderes antiinflamatorios ayudan con cualquier irritación o imperfecciones.
La borra del café te ayudará a suavizarte los labios.
Haz una mezcla de la borra del café y aceite de coco y aplícatelo todas las noches. Verás como te quedarán hermosos.
El café es enemigo de las ojeras.
Aplicada directament en la zona debajo de los ojos, la borra del café ayuda a reducir las ojeras si te lo aplicas un par de veces a la semana. La puedes mezclar con miel o un poquito de leche.
Las bolsas debajo de los ojos mejorarán con el café.
Haz una mezcla de té de manzanilla y una cucharada de la borra de café. Humedece dos algodones y colócatelos sobre los ojos. Descansa 20 minutos con ellos y verás la diferencia.
El café es un bronceador natural.
La mejor receta para hacer un bronceador natural a base de café es:
2 Cucharadas de aceite de almendras o de coco
2 Tazas de café colado
10 gotas de aceite esencial con aroma a naranja, coco o vainilla
Mézclalo y colócalo en una botella con atomizador. Eso sí, no te expongas al sol en las horas en la que está más fuerte.
Con la borra del café puedes hacer una mascarilla antiacné.
Mezcla la borra con un poco de café colado y frío y aplícatela en la cara. Déjala reposar por unos 15 minutos y lávatela con agua tibia.
El café también es buenísimo en la casa.
Los muebles y sillas de madera y cuero oscuro pueden limpiarse con un poco de café y un pañito para dejarlos brillante. Los componentes del café también ayudan a preservar el estado de tus muebles.
El café es maravilloso cuando de mascotas se trata.
Para alejar a los gatos de los muebles o evitar que tu perro se orine donde no debe, mezcla en un vaso de agua varias cascaras de limón, naranja y tres cucharaditas de café colado. La combinación de olores es fantástica para alejar a los animalitos de esas áreas prohibidas.
La borra del café te ayuda a cuidar tus animales.
La borra del café, por su parte, tiene la ventaja de matar y prevenir la proliferación de pulgas en la piel de tus animales.
La borra del café es muy nutritiva.
Tanto que sirve como abono natural para tus plantas y arbustos, incluso aquellas que necesiten una tierra más ácida. Mi abuelita tenía una receta efectiva: mezcla los residuos del café de la mañana con restos de zanahoria y rábano. ¡Veras que tus plantas se ponen hermosas!
El café es un ambientador natural.
Si deseas eliminar los malos olores de tu casa, incluyendo los de la comida y el baño, haz un potpurrí con la borra del café y agrégale unas gotitas de cualquier aceite esencial. Envuélvelo en muselina y tendrás el ambientador más poderoso y barato que hayas visto.
El café molido sirve para remover el polvo de tu casa.
Es buenísimo para dejar brillantes los mesones y las superficies de madera y mármol. ¿Te ha pasado que el maquillaje se te riega por toda la peinadora? Tranquila. Échale un poquito de café húmedo, pasa una servilleta y santo remedio.
Un masaje con café te ayudará a descansar los pies.
Mezcla la borra del café con aceite de coco, aceite para bebé o crema de almendras para la piel. Mientras más café tenga, más rápido será su efecto.
Masajeate los pies con la mezcla y, si puedes, ponte unas medias y déjatela sobre la piel toda la noche. Verás que en la mañana tus pies se verán rejuvenecidos y recuperados.
El sucio pegado en las ollas sale fácil con la borra del café.
Pon los gránulos sobre la parte manchada. Déjalo remojar con el agua más caliente que puedas y luego úsalos para despegar el sucio.
Reduce las pestes de insectos en tu casa.
Espolvorea la borra del café alrededor de la base de tu casa y en las ventanas. Verás que habrán muchos menos insectos.