Cuando estás a dieta lo primero que te viene a la mente es renunciar a tus comidas favoritas. ¡Nada más alejado de la realidad! Con un poquito de mesura y consciencia puedes disfrutar de lo que se te antoje sin necesidad de matarte en el gimnasio. ¿Mi solución? Meriendas creativas y deliciosas que te mantendrán llena por más tiempo.
Lee más en ¿Qué más?: Desayuno sabroso y fácil para que tus niños comiencen el día llenos de energía
Lo mejor es que estas sabrosas recetas son tan fáciles de hacer que toda tu familia se chupará los dedos sin sentir que están comiendo "saludable". ¡El truco perfecto!
Imagen vía Corbis Images
Frutas y queso
La idea de merendar frutas con queso no es sólo para gente elegante –¡al contrario!—es la forma más balanceada de degustar sabores que podrían ser “pecaminosos” para muchos. Aprende a combinar varios tipos de queso bajos en grasa (o uno con todos los hierros, en poca cantidad) con frutas menos calóricas como fresas, frutillas o arándanos. Para los más pequeños, unos pinchos de frutas y quesos se llevarán todos los aplausos.
Popcorn
Las cotufas o palomitas de maíz están recomendadas por ya que, aunque no provee mayor beneficio nutricional, son bajísimas en calorías (¡te puedes comer hasta tres tazas!) y literalmente sacian el deseo de salado o dulce. Hazlas en casa con aire caliente y agrégale especias, sal marina o azúcar de coco para un toque delicioso. ¿Te entró la flojera? Entonces prueba Popcorn, Indiana FIT. ¡Deliciosos sabores y sólo 37 calorías!
Tostadas de aguacate
El avocado toast se ha convertido en una merienda muy popular. Aquí no sólo combinas las grasas buenas con la proteína del pan integral, también te mantendrá llena por más tiempo si lo consumes en las mañanas. ¡Y es tan sencillo de hacer! Agrégale encima un tilín de sal gruesa o pimienta en hojuelas o májalo tipo puré para los más chiquiticos.
Nuggets de vegetales
Si te preocupa qué prepararle a tus niños para los días de escuela o si estás en plena dieta y detestas los vegetales, estos Nuggets de vegetales son para ti –y son tan sencillos y bajos en calorías- que vas a querer comerlos como almuerzo, merienda o cena. Laura Fuentes, creadora del website Momables, se dio a la tarea de lanzar un libro que –literalmente—es el mejor del mundo cuando a recetas fáciles se refiere: The Best Homemade Kids' Lunches on the Planet. ¡Perfecto para tenerlo a mano!
Muffins salados
¡Piensa fuera de lo dulce! Estos ponqués o muffins salados son ideales para cuando no soportas el hambre y mueres por un carbohidrato. Lo mejor de todo es que no necesitas mayor experiencia: bate un par de claras de huevo o un huevo entero, 2 cucharadas de harina todo uso o harina de almendras, sal, pimienta o especias al gusto y agrégale mozzarella, tomates o cualquier vegetal que se te ocurra. Al microondas por dos minutos y tendrás el snack más fácil y delicioso.
Mantequilla de nueces
Dos cucharadas de alguna mantequilla de nueces combinadas con vegetales, frutas o galletas de arroz te dan la energía necesaria para continuar con tus labores. Aunque son altas en calorías, es uno de los pocos alimentos que aceleran el metabolismo y ayuda a saciar el hambre. ¿Mi snack favorito? Un paquetico de Justin’s Maple Almond Butter con media banana y semillas de chía. ¡El postre perfecto!
Galletas de arroz integral
Aunque mi abuelita diga que esas galletas “no saben a nada” sé que resultan mis mejores amigas al momento de bajar de peso. Te explico por qué: son versátiles y tienen poquitísimas calorías (alrededor de 30 cada una) convirtiéndola en la compañía ideal cuando el pan o las harinas no son una opción. Yo las combino con mantequilla de avellanas y chocolate oscuro o, cuando necesito algo salado, le unto puré de atún y aguacate.