Francia es el país del queso, el vino, el chocolate y de comidas suculentas. Sin embargo tan sólo el 18% de la población tiene problemas de sobrepeso. Muchas personas están en la búsqueda del secreto de la dieta francesa, pero la razón del por qué las mujeres francesas son tan delgadas, es que ellas no creen en dietas, cada comida para ellas es una celebración.
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A continuación encontrarás 7 principios básicos de los franceses para lucir maravillosamente y seguir disfrutando de deliciosas comidas nutritivas.
1. Comen lentamente y con consciencia. Los expertos en salud han establecido la importancia de comer lentamente. Estudios han demostrado que cuando comemos con consciencia, consumimos menos calorías. En la cultura francesa, la comida no es simplemente comida, es un ritual en donde la familia se reúne para compartir, reír y hablar. Los alimentos resaltan esta experiencia. L__os franceses casi nunca comen en exceso porque ellos saborean cada bocado y esto los ayuda a sentirse satisfechos al terminar de comer.__
2. No importa el precio. Los franceses siempre han preferido la calidad de los alimentos, aunque les cueste un poco más. Al gastar más dinero en alimentos orgánicos y frescos, entonces pueden reducir sus gastos médicos a largo plazo. Además, utilizan el producto completo, incluyendo huesos y órganos, esto hace que su alimentación sea nutritiva y muy sabrosa.
3. Evitan comprar productos comercializados. Ellos son fieles a los productos orgánicos, cultivados localmente, aunque esto signifique ir varias veces el mercado durante la semana. Los franceses no se dejan persuadir por propagandas televisivas, pues compran productos específicos en sitios especializados. Si quieren pan, visitan la panadería, si quieren carne visitan su carnicería local. Cocinar con productos no procesados es la clave de su éxito. Sin embargo, los estadounidenses, para ahorrar tiempo y dinero compran comidas enlatadas, procesadas y preempacadas, ¿ves la diferencia?
4. Calidad y no cantidad. Para los franceses, no se trata de obtener la mayor cantidad de productos a un precio específico, sino de obtener el mejor producto y de la mejor calidad posible. Ellos saben que cualquier producto que se vende en paquetes grandes o al por mayor, está lleno de preservantes y químicos, además se rehúsan a consumir productos mediocres y de mal sabor. Optan por comprar productos de buena calidad aunque les cueste más pues los franceses saben que todos merecemos comer bien.
5. No se privan de nada. Cualquier comida que te prohíbas, se te va a antojar. Para los franceses nada está fuera de su alcance. Ellos disfrutan de un poco de vino con cada comida y como no se limitan, entonces nunca se exceden. Cuando degustan algún postre, ellos no piensan en la cantidad de azúcar y mantequilla que contiene, se concentran en la textura y hermosa presentación del pequeño dulce que tienen en su plato. Esto evita que coman en exceso y sin pensar.
6. Admiran los alimentos. Los franceses no creen en el conteo de calorías, pues esto simplifica el alimento y lo degrada. En cambio admiran la complejidad de los alimentos y la forma de cocción. De esta manera pueden disfrutar completamente su comida.
7. No compran nada falso. Los franceses no compran ningún producto que indique que sea: sin azúcar, sin colesterol o cualquier tipo de "carne" vegetariana, esto no está en su vocabulario. Ellos se enorgullecen cocinando y comiendo productos reales.
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Imagen vía Corbis Images
