Muchas madres creen que durante el verano los niños van a tener la oportunidad de correr, hacer ejercicio y perder peso, pero el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades ha demostrado lo contrario. Con la popularidad de los juegos electrónicos, los niños pasan más tiempo sentados y comiendo durante las vacaciones que cuando estan en el colegio. Aquí te listamos unos pasos a seguir para que tú niño no suba de peso durante las vacaciones y esté más activo.
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Normalmente los niños de familias de bajos recursos económicos que no tienen acceso a los campos de veranos ni a las actividades organizadas en los parques suben de peso durante el verano. Esto se debe a que los niños comen más porque están aburridos, duermen muy poco y se la pasan sentados por bastante tiempo. Está comprobado que la obesidad infantil es un problema vigente en los Estados Unidos ya que uno de cada tres niños sufre de la enfermedad. Al menos de que el niño tenga problemas genéticos o de tiroides, la obesidad es un problema de comportamiento. Si quieres que tu niño se mantenga activo este verano asegúrate de:
1. Limpiar tú cocina de chucherías y reemplazarlas con frutas y alimentos saludables.
2. Diseñar un horario de comidas para tu niño. El pequeño debe comer tres comidas al día para evitar que coma entre comidas.
3. Limita el tiempo que el niño pasa sentado enfrente del televisor o del computador a dos horas.
4. No lo obligues a participar de una actividad física que tú quieres. Deja elija la que él quiere. Cualquier actividad es importante así sea que camine por el vecindario.
Es importante recordar que los niños tienen que moverse más. Muchas escuelas de este país no tienen gimnasios y si los tienen, los niños los usan muy poco al menos de que hagan parte del equipo. Los niños tienen que hacer ejercicio a diario para estimular su cerebro y facilitar el aprendizaje. ¡Así que a caminar se dijo!
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