En otro episodio del terror del show "My Strange Addiction" que pasa por la cadena TLC, esta semana la adicción no fue comer pañales sucios, parecerse a Justin Bieber o querer convertirse en un sirenito, sino otra peculiar obsesión.
Brittoni, de 22 años de edad, es adicta a comer maquillaje. What? Si. Y cuando te enteres cómo y en dónde lo hace no vas a volver a ir a tu tienda favorita…
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¿Cómo una persona come maquillaje? Muy sencillo, ella literalmente lame las paletas de sombras, lipsticks y rubor.
Cuando vi el video de cómo lo hace, se me hizo muy similar a la obsesión que yo tengo con la Nutella, sólo que yo no abro los botes en el súper y los vuelvo a colocar en el estante. Ah, se me olvidó comentarles… Ella se come, prueba o lame el maquillaje de "test" de las tiendas.
"Puedes imaginar cómo el color cubre tus entrañas con cualquier tono que te estés comiendo. Es como un antojo de tu dulce favorito", explica la mujer.
Por muy simpático o antihigiénico que nos parezca colorear nuestro intestino, este exótico hábito le ha costado a la jovencita, ya que casi todo el maquillaje está hecho a base de químicos dañinos.
Los doctores ya le advirtieron que podría terminar con una enfermedad mortal por comerse sus 10 compactos de sombras al día.
Después del programa, Brittoni ha logrado recuperarse y aunque es difícil que uno logré deshacerse de una adicción, se puede controlar.
Es muy curioso cómo la mente funciona. No creo necesariamente que esta chica esté loca. Todos tenemos nuestras extrañas afecciones, el problema es que cuando ellas interfieren con nuestra salud. Es ahí cuando uno debe de pensar en buscar ayuda para lograr controlarlas.
Ojalá que esta chica logre recuperarse. Por lo pronto me mantendré lo más alejada que pueda de los probadores de cosméticos.
Imagen vía Corbis
