Esta INCREÍBLE mujer bajó de talla 24 a 8 y aquí te decimos cómo y por qué

Cuando a su regreso de Afganistán Jamie Price llegó a su casa, pensó que su familia se había mudado. No reconoció a Annika Price, su esposa y madre de sus dos hijos, Charlie y Bobby. Sólo cuando el vio el brillo de los ojos, humedecidos por la felicidad del reencuentro, entendió que "esa" era la misma mujer con la que se había casado. No vas creer por qué Annika estaba irreconocible.

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Cuando Jamie y Annika se casaron, jamás pensaron que la diminuta mujer quien mide apenas 5 pies, se transformaría en una persona obesa que llegó incluso a pesar 238 libras. Pero una vez que tuvo sus hijos y coincidiendo con que a su marido un soldado al servicio del ejército estadounidense, lo enviaron a Afganistán, Annika comenzó a ganar peso sin parar.

No solo llegó a pesar el doble de lo que se considera normal para su estatura, sino que además, s__u índice de grasa corporal subió peligrosamente y llegó a marcar 41%__. Todo fue consecuencia de haberse refugiado en la comida chatarra luego de la partida de su marido, quien en cambio, por ser un soldado se mantenía en excelente estado físico.

Su marido regresaba y con cada partida, Annika continuaba ganando peso. Aunque Jamie nunca le reprochó nada y la siguió amando, Annika se sentía cada vez peor. Ya era talla 24. Tal era su sobrepeso, que le avergonzaba ser la mamá más gorda de colegio de sus hijos. No podía llevar a sus niños a la piscina porque no podía ponerse en bañador.

Hasta que un día decidió hacer algo por amor a su marido y a sus hijos, y aunque ella no lo diga, yo creo que también por amor a sí misma. Se inscribió en el programa Cambridge Weight y cambió su vida.

Armada de un nuevo régimen alimenticio que incluía sopas, cereales y licuados, Annika comenzó a perder peso. Lo que más le costó fue la primera semana porque pasar de la comida chatarra y una vida sedentaria frente al televisor, a comer saludable, en pequeñas porciones y hacer ejercicio diaramente, significó un shock para su organismo.

Jamás desmayó y la entiendo. La motivación de devolverle a su marido la mujer de la que se había enamorado, la mantuvo firme. Por algo dicen que el amor mueve montañas. Además de peso, Anikka comenzó a perder pulgadas y tallas.

Y así, con constancia, paciencia y mucho esfuerzo, en siete meses Annika pasó de talla 24 a talla 8 y yo digo que se ve espectacular. Ahora puede jugar con sus hijos y Jamie está súper orgulloso de ella. Para mí lo mejor de esta historia es que Annika recuperó su autoestima y se siente cómoda y feliz en su propia piel.

 Imagen vía Facebook