Hoy quiero hablarte de un tema al que nos podemos relacionar todas las mujeres, el cáncer de seno. Muchas lo han padecido, otras conocemos a alguien que ha luchado contra esta terrible enfermedad. En mi caso, mi suegra es una sobreviviente de cáncer.
Según la Sociedad Americana de Cáncer, alrededor de 232,340 casos de cáncer de mama invasivo serán diagnosticados este año 2013 y cerca de 39,620 mujeres perderán esta batalla. Estas estadísticas producen temor con tan sólo leerlas.
Pero hay maneras en las que podemos reducir el riesgo de padecer cáncer de seno.
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Hacer ejercicio: Sabías que iba a mencionar esto de primero. Si eres una lectora constante, entonces sabes por qué pienso que el ejercicio es tan importante y no sólo porque te ayuda a verte mejor físicamente, eso es sólo un beneficio adicional.
Yo las incito a hacer ejercicio porque es una manera de mejorar la salud y el estilo de vida. Un estudio realizado por "The Women's Health Initiative" demostró que caminar rápido, entre 1 ½ y 2 ½ horas a la semana reduce el riesgo de padecer cáncer de seno un 18%. El riesgo se reduce aún más si se aumenta el tiempo a 10 o más horas de caminata rápida a la semana.
Otra de las razones de ejercitarse es que mantiene tu peso controlado. El sobrepeso aumenta tu riesgo de padecer cáncer de mama.
Dormir: No te olvides de dormir las 8 horas necesarias para que tu cuerpo descanse diariamente. Cuando no duermes lo suficiente, te sientes más estresada y además estarás muy cansada para hacer ejercicio. Esto también aumenta tus posibilidades de comer en exceso.
Pero las horas de sueño no son el único factor. Las mujeres que trabajan de noche corren un riesgo casi 50% mayor de sufrir de cáncer de seno. Estudios han demostrado que dormir entre las 10:00 pm y levantarse a las 6:00 am le proporciona a tu cuerpo la mayor cantidad de producción de melatonina. La melatonina suprime el gen BRCA1 y regula los niveles de estrógeno. Esto también mejora tu inmunidad. ¡Así que no sólo es importante proporcionarle a tu cuerpo con el descanso necesario, sino también hacerlo en el momento adecuado!
El estrés: El estrés podría ser la causa de múltiples problemas de salud. Yo conozco a muchas mujeres que son extremadamente disciplinadas sobre la eliminación de alimentos y comidas tóxicas de su plan alimenticio, pero aún así se aferran a relaciones extremadamente tóxicas. Si te encuentras en una relación la cual te causa estrés constante, debes de considerar los efectos de esto a tu salud.
Sí, el estrés forma parte de tu vida o tienes que vivir con estrés, debes aprender a controlar tu respuesta ante una situación estresante. Podrías tomar clases de yoga o aprender a meditar.
La nutrición: Seguir un plan alimenticio saludable reduce el riesgo de muchos problemas de salud. Proporcionarle a tu cuerpo la nutrición adecuada lo ayuda a funcionar de manera óptima. Las frutas y vegetales frescos, le proporcionan a tu cuerpo una gran cantidad de antioxidantes los cuales le ayudan a combatir el riesgo de sufrir cáncer de muchas formas.
Dos de los alimentos más beneficiosos son la linaza y los hongos setas. Ellos inhiben la forma de estrógeno que puede producir cáncer.
Reduce o elimina los alimentos procesados de tu plan de alimentación. Estas comidas contienen una gran cantidad de toxinas y sustancias químicas que nunca debieron de ser aptas para el consumo humano. Come comida de VERDAD. También elimina la cafeína, azúcar y edulcorantes artificiales de tu alimentación.
La prevención: El último consejo es la prevención. Un diagnóstico temprano es la mejor manera de combatir el cáncer de seno. Esto es, especialmente importante a medida que envejecemos, si tienes historial de cáncer de seno en tu familia, si sufres de sobrepeso o si fumas.
Sin embargo, todas las mujeres deben de seguir estas medidas preventivas. Hazte un autoexamen, busca nudos o cambios en el tejido mamario. Si te encuentras algún nudo, por más pequeño que sea, visita a tu medico lo antes posible. Incorpora este autoexamen a tu rutina diaria en la ducha.
No pospongas tu chequeo anual y programa tus mamografías a su debido tiempo. Sí a tu doctor se le olvida mencionarlo, recuérdaselo tú.
Y si todavía fumas ¡DEJA DE HACERLO!
Estos consejos pueden parecer simples, pero su poder está en la forma en la que trabajan juntos. El cáncer de seno es algo aterrador para cualquier mujer. Pero viviendo una vida saludable puedes reducir su riesgo.
Recuerda de compartir este artículo con todas tus amigas para que ellas también se beneficien de esta información. ¡Juntas podemos hacer de este mundo un mundo más feliz y saludable!
Imagen vía Thinkstock
