Estoy fascinada con la moringa, una planta que últimamente se ha hecho famosa por sus propiedades extrordinarias. Mi madre me mencionó esta planta y me dijo que es casi milagrosa, porque sirve para montones de cosas, desde ayudar a perder peso hasta prevenir el cáncer.
No había leído nada acerca de los beneficios de la moringa para la salud. Sabía que era buena para la piel porque había estado usando una loción de moringa desde hace meses. Me puse a investigar acerca de esta planta y ahora me he vuelto tan fanática como mi madre.
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A pesar de que la moringa es una novedad para nosotras aquí, esta planta ha sido súper valorada por sus propiedades nutritivas y medicinales en África y Asia desde hace siglos. Se usaba para mejorar la salud y obtener energía. También se usaba como alimento en las temporadas de sequía y escasez.
El gran secreto de la moringa es su contenido extraordinario de nutrientes. Una onza de hojas de moringa contiene:
- más vitamina A que una onza de zanahoria,
- más hierro que una onza de espinaca,
- más calcio que una onza de leche,
- más potasio que una onza de banana,
- más vitamina C que una onza de naranja.
iNo se puede pedir más de una planta! Esta riqueza de nutrientes convierte a la moringa en un alimento excelente para las personas que quieren perder peso. Pueden obtener vitaminas, minerales y proteínas sin grasas saturadas ni demasiadas calorías.
Además, la moringa es alta en las vitaminas B1, B2 y B3. Estas vitaminas son esenciales para que el cuerpo convierta los alimentos en energía y no los almacene como grasas.
No existen estudios clínicos que muestren los efectos de la moringa en la obesidad. Sin embargo, a nivel popular se piensa que la moringa ayuda a perder peso porque acelera el metabolismo, ayuda a controlar el apetito y da energía.
Creo que vale la alegría probar esta planta. Se puede tomar en té. Sus hojas se comen como un vegetal, de una manera similar a la espinaca.También ahora se pueden conseguir suplementos de moringa. Si quieres tomar los suplementos de moringa, consulta con tu médico primero.
Imagen vía Thinkstock
