Vivimos con él todos los días, es el responsable de nuestros cambios de ánimo por lo menos una vez al mes -cuando nos llega el periodo- y gracias a él, en este mundo existen los seres humanos. Sí, hablo de la anatomía femenina, una de las creaciones más bellas de la naturaleza, cuyas características, tan específicas lo hacen tan fabuloso y enigmático a la vez. No obstante, aunque convivimos con él cada día, no es raro que pocas mujeres lo conozcan a profundidad. Aquí te decimos 5 cosas que las mujeres no saben sobre su propio cuerpo, según una lista publicada en el Huffington Post.
- Las vaginas y los tiburones tienen algo en común: Quién diría que los tiburones tienen algo similar a nuestra vagina. Digamos que no se parecen en el tamaño, en el color ni en nada. Pero, hay algo que tienen en común y es el flujo vaginal. Y es que, aparentemente, el lubricante vaginal natural está formado por sudor, seborrea, moco cervical, células exfoliadas, urea, acético, ácidos lácticos, alcoholes complejos y glicoles, cetona y el escualeno. Un componente orgánico que no es exclusivo en los seres humanos, pues el hígado de los tiburones también lo tiene.
- Las mujeres escuchan con los dos lados del cerebro: Ya decía yo, que no era normal que los hombres a veces, pareciera que no escuchan. Y es que, según un estudio realizado por la Universidad de Medicina en Indiana, mientras la mayoría de los varones mostraron únicamente actividad en el lado izquierdo del cerebro (asociado a la capacidad de hablar y escuchar), las mujeres mostraron actividad adicional, en la parte derecha del cerebro (asociada a la creatividad y la capacidad para expresarse) cuando se les pidió que escucharan un discurso.
- En las fotos solemos vernos más jóvenes que los hombres: ¡Hurra! Esto sí que es una buena noticia. Y es que, según Patricia Barnes-Svarney, autora del libro Why Do Women Crave More Sex in the Summer? ("¿Por qué las mujeres tienen más sexo en el verano") esto se debe a que la piel de los hombres es más delgada y por tanto, tiende a mostrar más las líneas de expresión. Además, los varones tienen un problema de epidermis que consiste en que la testosterona puede hacer que la complexión de la piel parezca más escurridiza y grasosa.
- Las mujeres tenemos un intestino más largo. Aunque ambos géneros posean los mismos elementos en el sistema digestivo, la parte más baja del colon, tiende a ser más largo en las mujeres. Y por ende, las féminas con cuerpos más pequeños, sufren más las consecuencias de esto (pues sus intestinos tienen muy poco espacio). Es por esto que, supuestamente, nosotras solemos tener más problemas gastrointestinales, ya que nuestro sistema digestivo no tiene tanto espacio para expandirse, cuando tiene exceso de gas, aire o comida.
- Nunca te crecerá de más el vello púbico. Puede sonar chistoso, pero alguna vez te habías preguntado, cómo es que el vello púbico no crece hasta las rodillas, por ejemplo. La razón, según este reporte, es que el vello púbico tiende a caerse, después de casi tres semanas. Lo que representa sólo una fracción de la esperanza de vida que tiene el cabello, pues para éste se calculan, hasta más de siete años.
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