¿Se te hace díficil mantener tu motivación para hacer ejercicio? Si te has propuesto hacer ejercicio con regularidad y no lo logras por falta de motivación, no te sientas mal contigo misma ni te juzgues. Las últimas investigaciones realizadas por expertos en este tema revelan que los métodos que se usan normalmente para mantener la motivación de hacer ejericicio no funcionan casi nunca.
La mayoría de la gente intenta motivarse enfocándose en los beneficios que recibirá del ejercicio en el futuro. Se enfocan en el peso que van a perder, en las enfermedades que van a prevenir y en los beneficios de salud que obtendrán a largo plazo. Sin embargo, los expertos han observado que la motivación para hacer ejercicio se mantiene más cuando el enfoque es en los beneficios inmediatos del ejercicio.
Es mejor, por ejemplo, enfocarse en el sentido de bienestar y relajación que se siente inmediatamente después de ejercitar el cuerpo, en la alegría y vitalidad, en la oportunidad de compartir con otras personas o de estar en la naturaleza.
He comprobado lo que dicen estos estudios en mi propia experiencia. Mi principal fuente de motivación para mantener una vida activa siempre ha sido la pasión y la alegría. Por eso, mi ejercicio es el baile, caminar y practicar Yoga.
Muchas veces me he sentido súper cansada, pero me animo a hacer mi rutina de Yoga o a caminar porqué sé que despúes voy sentir más vitalidad. Y para bailar nunca me falta la motivación, porque simplemente el baile me hace feliz.
He aquí cuatro secretos que he descubierto que ayudan a mantener la motivación de hacer ejercicio:
Escoge una rutina de ejercicio que te apasione y guste. El gimnasio no es la única opción para hacer ejercicio. Si te gusta la música y el baile, escoge una clase de baile. Si te gustan los deportes, únete a un equipo de tu deporte favorito. Si te gusta el agua, escoge la natación o los deportes acuáticos. Si prefieres estar calmada y cultivar tu espiritualidad, matrículate en un curso de Yoga. Escoge lo que te haga feliz.
Enriquece tu vida con pasatiempos que ejerciten tu cuerpo. Puedes tener una vida muy activa, sin recurrir una rutina de ejercicio. Si amas la naturaleza, entonces procura salir a caminar en la naturaleza todas las semanas o únete a un club de senderismo. Si te gustan los deportes, pues sal a jugar con tus hijos los domingos.
Socializa mientras ejercitas tu cuerpo. Si te encanta compartir con la gente y eso es lo que más te motiva, entonces escoge actividades sociales que ejerciten tu cuerpo. Los bailes de pareja son actividades sociales excelentes. Caminar con tus amigas por las calles de tu ciudad, o sea salir a pasear, también es una actividad social excelente para el cuerpo.
Enfócate en el momento presente. Cuando estés ejercitando tu cuerpo, sea la actividad que sea, disfruta el momento presente, No pienses en las libras que podrías perder ni en los músculos que podrías fortalecer. ¡Siente la alegría de mover tu cuerpo!
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