Ahora entiendo porqué últimamente me cuesta muchísimo más trabajo concentrarme y recordar ciertas cosas. Al parecer, la mala memoria que me aqueja estos días, se la debo a los días calurosos. ¡Es verdad! No creas que estoy intentando justificar el que se me olvide lavar los trastes o hacer ciertos deberes, pues para mi fortuna, un grupo de psicólogos australianos acaba de descubrir que __en los días soleados, la memoria funciona peor que en los días lluviosos.
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La investigación citada por la revista Muy Interesante, señala que después de hacer una serie de pruebas, los investigadores de la Universidad de Nueva Gales del Sur, descubrieron que las personas examinadas recordaban más el nombre de ciertos objetos que les hicieron memorizar durante los días grises y lluviosos que en los días en los que hacía mucho sol. Específicamente, las pruebas realizadas a los participantes del estudio, demostraron que los que memorizaban en los días lluviosos, recordaban hasta tres veces más objetos que los que lo hacían en los días de sol ¿La razón? Los expertos explicaron que cuando la gente se encuentra de buen humor, tiende a estar desconcentrada y presta menos atención, mientras que los días soleados, hacen que las personas se distraigan más.
Seguramente te preguntaras, ¿qué ventaja puedo sacar de todo esto? La respuesta es sencilla, cuando no quieras que a tu marido o a tus hijos se les olvide algo, proporciónales la información durante los días lluviosos y cuando quieras que algún dato pase desapercibido (como cuando le tengas que decir a tu marido que gastaste más de la cuenta en una compra inesperada) coméntaselo cuando el sol esté brillando con todo su esplendor. ¡Quién sabe! Tal vez este estudio está en lo en lo correcto y a tu esposo se olvida este pequeño inconveniente, después de todo, no perdemos nada con intentarlo.
¿Qué opinas sobre este estudio? ¿Has notado que tienes peor memoria durante los días soleados?
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Imagen vía Dan Nguyen @ New York City/flickr