No se porque pero todo lo que he escrito hoy está relacionado con tragedias y bebitos. Desgraciadamente, esta es otra triste noticia: según un estudio publicado ayer en la revista Journal of the American Medical Association, cada año nacen más de 13 mil 500 bebitos adictos a los medicamentos analgésicos opiáceos que usan sus madres. Es decir, ¡aproximadamente un nacimiento de un bebé adicto cada hora!
Aunque ya no nacen adictos al crack como en los años 80 y 90, esta sigue siendo una noticias súper triste y desalentadora porque no me puedo imaginar por lo que debe pasar un bebito recién nacido adicto a medicamentos para el dolor como Vicodin y Oxycontin.
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Además de nacer con un peso mucho más bajo de lo normal, el síndrome neonatal de abstinencia causa todo tipo de síntomas, incluyendoirritabilidad intensificada, temblores, espasmos, dificultades respiratorias e intolerancia a la alimentación. ¡Pobres angelitos!
Tristemente, no parece que las cosas van a cambiar ya que según un reciente estudio de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDS por sus siglas en inglés), la venta de analgésicos opiáceos como Vicodin se han cuadriplicado en la última década. Es más, en la Florida, donde las muertes por abuso de estos medicamentos son cuatro veces más comunes que el número de muertes por drogas ilícitas, el número de recién nacidos adictos a los analgésicos ha aumentando cinco veces en los últimos seis años.
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Me rompe el corazón escuchar noticias así y es por eso que yo jamás de los jamases–ni siquiera después de mi cesárea–he tomado y espero nunca tomar este tipo de medicamentos ya que sé que muy fácilmente se pueden convertir en una adicción.
¿Qué te parece este estudio?
Imagen vía "G" jewels g is for grandma/flickr
