La avena es una de las fibras solubles más maravillosas para adelgazar. Además de desintegrar la grasa y reducir la cintura, es buena para bajar los niveles de colesterol y azúcar. Aquí te cuento acerca de los beneficios extraordinarios de la famosa dieta de la avena, para que compruebes sus resultados en dos semanas.
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Imagen vía Corbis
En ayunas
Apenas te levantes, toma una vaso de agua de avena. Prepáralo la noche anterior, hirviendo hojuelas en agua.
Desayuno
Disfruta una taza de avena caliente con canela. Prepara la avena original (sin sabor) en agua, y agrega frutas rojas.
Media mañana
Cuando el hambre ataca a la media mañana, agrega dos cucharadas de avena molida a una taza de yogur sin grasa, ni sabor. Vas a quedar satisfecha.
Almuerzo
Prepara una ensalada con espinacas, tomates, cebolla roja y edamame. Agrégale una cucharadita de almendras y dos cucharadas de avena molida. Adereza con una cucharada de aceite de oliva y otra de vinagre de cidra de manzana.
Postre
Prepara en casa tus propias galletas de avena, o compra unas que no tengan grasa ni azúcar. Las venden en los supermercados, bajo los productos para diabéticos.
Media tarde
Haz un licuado con una taza de agua, un cuarto de taza de avena en hojuelas y media taza de fresas. ¡Delicioso y sin grasa!
Cena
Prepara un pedazo de pescado, salteado sin aceite. Acompáñalo con un vegetal crucífero –como el berro o la col– al vapor, y con un vaso de agua de avena.
Después de la cena
Si te dan ganas de comer algo después de la cena, compra cereal seco con avena. Puedes comer un cuarto de taza, pero sin leche.
Los fines de semana
Para que no abandones la dieta durante el fin de semana, lleva barras de granola de avena en tu bolso. Limita la cantidad, a una barra al día.
En un restaurante
Si el restaurante no ofrece avena de almuerzo o cena, puedes ordenar quínoa.
