**Seguro que te ha pasado: picas un jalapeño, o aun peor, chile serrano o habanero, te lavas las manos, frotas tus ojos, y ¡uy, qué ardor! Si usas lentes de contacto, amerita casi que llames a los bomberos. Para que esto no te ocurra, comparto contigo 10 tips para sacarte el picante de las manos.
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Imagen vía Corbis
Cocina con guantes
Más vale prevenir que lamentar. Usar guantes es lo mejor porque así tu piel no tocará los chiles. Sin embargo, ¿no te parece un fastidio eso de cocinar con guantes? Si estás de acuerdo conmigo, pasa a la siguiente foto, que te tengo otra medida preventiva.
Frótales aceite
Antes de tocar los chiles, coloca dos gotitas de aceite de oliva o de coco en tus manos, y frótalas. Si lo haces, te protegerás de la capsaicina, el componente que estos alimentos contienen, que es verdaderamente lo que pica.
Lávalas con detergente
Como los detergentes que se usan para lavar platos contienen ingredientes que cortan la grasa, estos te quitarán el aceite del componente que pica. Lávalas bien y frota las yemas de tus dedos.
Usa cloro
No me gusta la idea de utilizarlo en las manos, pero si no te queda más remedio, entonces, agrega un chorrito de cloro en un tazón con dos tazas de agua. Introduce los dedos por unos segundos, y luego enjuaga. Se supone que el cloro ayude a disolver con rapidez la capsaicina.
Sumérgelas en leche
La leche tiene muchas propiedades y, una de ellas, es aliviar el ardor que provocan los chiles crudos. Si te arden, sumérgelas en un tazón con leche entera. La idea es que la grasa que contiene la leche te ayude a disolver la capsaicina.
Pon yogur
Al igual que la leche, el yogur te puede ayudar a aliviar el ardor. Utilízalo si no tienes leche entera en casa.
Úntales alcohol
Luego de lavarte las manos con agua y jabón, frótalas con un poco de alcohol.
Usa un gel antibacterial
Limpiarte con gel antibacterial siempre ayuda.
Aplica bicarbonato
Haz una pasta de bicarbonato de soda con un poquito de agua, y frótate las manos, con énfasis en los dedos. Luego, enjuágalas bien.
Ponte loción
No importa el remedio que escojas, siempre usa loción de manos después de cortar tus chiles, cocinar y hacer cualquier otro oficio del hogar.
